Por Selene Alonzo Romero, El Universal/GDA
Mantenerse saludable no solo depende de la medicina moderna. En las cocinas latinoamericanas abundan las plantas medicinales desde épocas prehispánicas.

Y es que, machacadas, en té, maceradas o en vaporizaciones, estas ayudan a conservar un estado de salud físico, emocional, mental o espiritual y así mejorar el estilo de vida de las personas. Porque que bien cae un té de manzanilla o de lavanda.

Lo mejor es que muchas de estas hierbas se pueden cultivar en casa y convertirse en un alivio no solo a la economía, sino a la salud. Pese a que la herbolaria es un recurso básico de la medicina, el conocimiento sobre ella es escaso.

• Yerba Santa

Se trata de una planta aromática y comestible que ayuda a disminuir la fiebre, mejora el funcionamiento intestinal y reduce el dolor estomacal.

Durante la época de la colonia, los sacerdotes le atribuyeron el mote de “hierba santa” por sus propiedades curativas que incluyen propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la inflamación vaginal y estomacal.

En té ayuda a aliviar la tos y congestión respiratoria, además de que aporta vitamina C y previene enfermedades respiratorias como asma.

• Hierbabuena

Se utiliza en el tratamiento de nauseas, vómito y desordenes gastrointestinales. Aunque en el pasado también se llegó a utilizar para blanquear los dientes, como hoja seca en polvo.

Además, se ha utilizado como repelente de hormigas, mosquitos y avispas.

• Manzanilla

Comúnmente a la venta en pequeñas macetas y se utilizan para tratar padecimientos como la fiebre, inflamación, espasmos musculares, desordenes menstruales e insomnio. Además, en aceite la manzanilla es utilizada en aromaterapia.

Se pueden emplear en vaporizaciones contra la ansiedad y la depresión.

• Lavanda

Si bien se les considera plantas de ornato y para la obtención de concentrados aromatizantes. Su esencia se ha utilizado en la industria cosmetológica y otros productos para enmascarar olores en productos tradicionales.

En té es utilizada para tratar dolores reumáticos, tortícolis y dolor de cabeza, además de heridas, quemaduras y picaduras de insectos. Entre otros de los usos que se le atribuyen está el curar las anginas y resfriados.

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• Aloe Vera o sábila

No tan comúnmente hallada en los hogares, esta planta curativa era empleada por los antiguos chinos para tratar quemaduras, heridas y bajar la fiebre. En la actualidad también se emplea en la cosmetología.