Tiroides: ¿El yodo puede ser un factor de riesgo emergente en los trastornos tiroideos?

Los trastornos tiroideos son bastante comunes entre la población mundial, pues la deficiencia o exceso de hormonas tiroideas puede determinar el funcionamiento de gran parte del organismo.

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tiroides

Por Milenka Duarte, El Comercio - GDA
La tiroides es una glándula que está localizada debajo de la laringe que produce las hormonas tiroideas y calcitonina. Básicamente, esta tiene múltiples funciones, pues actúa sobre el organismo, debido a que todos los órganos tienen receptores de hormonas tiroideas, por lo que se encarga del crecimiento de todas las células, además ayuda a regular el metabolismo, puesto que es responsable de la temperatura corporal, así como de fiscalizar a las otras hormonas del cuerpo.

Por consiguiente, como señala el endocrinólogo Jesús Rocca no puede haber ni deficiencia ni exceso de las hormonas tiroideas, ya que al ser las funciones son muy importantes, el cerebro es el que se encarga de regularlas, razón por la cual, que tan bien o mal trabaje nuestra glándula tiroidea depende de ello. Actualmente, se estima que aproximadamente unas 750 millones de personas a nivel mundial padecen de alguna patología tiroidea, de las cuales el 60% no es consciente del diagnóstico, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

¿Cuáles son los trastornos tiroideos más comunes?

Principalmente, se pueden dividir en tres grandes grupos. En primer lugar, cuando la glándula tiroide produce menos hormonas tiroideas, se le denomina hipotiroidismo, mientras que, el hipertiroidismo corresponde al exceso de hormonas. Por otro lado, están los nódulos tiroideos, los cuales ocurren cuando una parte de la glándula crece de forma anormal. Generalmente, estos sueles ser benignos; no obstante, en algunos casos pueden ser tumores malignos que, dan lugar a un cáncer de tiroides, indicó Rocca.

“Es importante destacar que estos son problemas muy frecuentes en el Perú y el mundo, por ejemplo, se calcula que entre un 5% a 10% de la población peruana padece de algún trastorno de tiroides, siendo el hipotiroidismo el más común, seguido de los nódulos tiroideos y finalmente, el hipertiroidismo”.

¿Cuáles son los factores de riesgo y causas más comunes de estos trastornos tiroideos?

Hipotiroidismo
Según el endocrinólogo, la causa depende del grupo de edad en el que se manifiesta. Por ejemplo, en el caso de un niño recién nacido que tiene esta enfermedad, la cual puede surgir por una alteración en el desarrollo de la glándula toroide o porque está mal ubicada en el cuerpo, por ende, hay un mal funcionamiento. En cambio, en el caso de los adultos, pueden existir diversas causas, siendo las más comunes la tiroiditis de Hashimoto y la tiroiditis atrófica. De igual manera, esta puede producirse por un tratamiento radiactivo y por el uso de medicamentos, como la amiodarona, el litio, el interferón alfa y la interleukina-2 que pueden impedir que la glándula tiroides produzca hormona tiroidea en forma normal, así como por deficiencia o exceso de yodo.

Con respecto a la sintomatología, en el caso de los recién nacidos, cuando el hipotiroidismo no es detectado y tratado a tiempo, el menor puede tener problemas cognitivos irreversibles, además de dificultades de crecimiento. Esta afección suele afectar más a las mujeres que a los hombres, con una relación 3: 1, por lo que si se presenta entre los 20 y 35 años, es decir, en plena edad reproductiva, esto podría ocasionar problemas de fertilidad. Si este se manifiesta en adultos, puede aumentar el riesgo cardiovascular, mientras que, en adultos mayores puede haber cuadros de depresión o simulares al Alzheimer o en caso la persona ya tenga estos padecimientos, el hipotiroidismo los agrava, explicó Rocca. “Los síntomas clásicos de hipotiroidismo son fatiga, poca concentración, aumento del peso, estreñimiento, cabello seco y delgado, piel seca, períodos menstruales intensos o irregulares, problemas de fertilidad en mujeres, dolor articular y muscular, baja frecuencia cardiaca, entre otros”.

Nódulos tiroideos
Es muy común que estos se desarrollen por un crecimiento excesivo del tejido tiroideo, a lo que se le denomina adenoma de la tiroides, aunque estos no suelen ser catalogados como cancerosos ni graves, a menos que genere síntomas molestos por su tamaño. Como destacó Rocca, los adenomas más frecuentes pueden ser: quiste tiroideo, bocio multinodular o en casos más extremos, el cáncer de tiroides. “Es fundamental tener en cuenta que, el 90% de los nódulos tiroideos son benignos, pero hay un 10% que podría desarrollar una neoplasia. Los casos más comunes de cáncer en este órgano son en personas mayores de 60 años o en niños pequeños. Desde luego, el antecedente familiar o de radiación a nivel cervical pueden ser considerados como factores de riesgo para incrementar la probabilidad de un proceso oncológico”.

Hipertiroidismo

La causa más frecuente -en más del 70% de las personas- es la sobreproducción de hormona tiroidea por parte de la glándula tiroidea. Según el American Thyroid Association (ATA), esta condición se conoce como enfermedad de Graves, el cual es un trastorno autoinmune en el que el sistema inmunitario ataca a la tiroides y hace que se produzca demasiada hormona. Igualmente, las personas pueden tener síntomas temporales de hipertiroidismo si tienen una afección llamada tiroiditis que es causada por un problema con el sistema inmune o una infección viral que hace que la glándula libere hormona tiroidea.

“Las personas con hipertiroidismo habitualmente tienen síntomas, como frecuencia cardíaca acelerada, palpitaciones, nerviosismo, irritabilidad, temblor de manos, ansiedad, bajo peso, trastornos menstruales, fatiga, problemas para tolerar el calor y presión arterial elevada”, expresó el especialista.

¿Cuál es el impacto del yodo en los trastornos tiroideos?

El yodo es un elemento sumamente necesario para la producción de hormonas tiroideas y como el organismo no lo produce, este debe ser un esencial de nuestra dieta, motivo por el cual, debemos incorporar alimentos, como pan, queso, sal de mesa yodada, pescados de agua salada, algas marinas, mariscos, leche de soja, sal de soja, yogurt, entre otros. En efecto, la deficiencia de yodo no permite la producción de hormonas tiroideas, lo que genera que la glándula tiroidea se agrande progresivamente, con la finalidad de compensar la demanda de producción de estas hormonas. Por otro lado, a medida que caen los niveles de yodo en el cuerpo, también se puede desarrollar hipotiroidismo, según el ATA.

Sin embargo, el consumo excesivo de este elemento también puede ser perjudicial para la salud, ya que pueden desencadenarse problemas de tiroides, como nódulos, hipertiroidismo y enfermedad autoinmune de las tiroides. Definitivamente, la administración de grandes cantidades de yodo por medio de fármacos puede ocasionar o exacerbar tanto el hipertiroidismo como el hipotiroidismo.

¿Cuál es la relación entre los trastornos tiroideos y otras enfermedades?

Por un lado, el hipotiroidismo no tratado puede ocasionar una enfermedad cardiovascular, aumentando así el riesgo de infarto y de una afección coronaria. En cambio, el hipertiroidismo puede causar fallas en el corazón, como insuficiencia cardíaca y diversos grados de arritmia, además de un elevado riesgo de desarrollar osteoporosis, pues el exceso de hormona tiroidea produce un aumento de la pérdida de masa ósea, mencionó el médico.

Adicionalmente, recalcó que, los trastornos tiroideos-hipotiroidismo e hipertiroidismo- cuando no son abordados médicamente, pueden generar hiperglicemia, situación que empeora significativamente el curso de la diabetes. De igual forma, en el hipotiroidismo, la glándula tiroide no produce la cantidad suficiente de ciertas hormonas importantes, razón por la que puede impactar en la ovulación y afectar en la fertilidad de las mujeres.

“En algunos casos para evitar o contrarrestar un posible caso de infertilidad causado por este trastorno tiroideo, es importante valorar las hormonas y si se registra una leve alteraración en las mismas, puede indicarse un tratamiento con levotiroxina, lo que podría mejorar las posibilidades de concepción”.

Ciertamente, es fundamental que las personas; sobre todo, las poblaciones de riesgo, como aquellos que tienen antecedentes familiares de problemas de tiroides o de enfermedades autoinmunes, como artritis, lupus, vitíligo, anemia perniciosa, entre otras, deben realizarse un chequeo de hormonas tiroides. Asimismo, todos los adultos mayores de 60 años deben pasar por el médico, pues casi un 20% de los casos se dan en este grupo etario. Por esta razón, es importante concientizar a la población sobre los problemas de la tiroides y ante cualquier sospecha, es sustancial acudir al especialista, ya que con un diagnóstico precoz y un buen tratamiento, las personas pueden realizar su vida con total normalidad, precisó el endocrinólogo.

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