La pasada semana Terminal Cuenca del Plata S.A, celebró una nutrida reunión en sus instalaciones portuarias dando a conocer sus futuras acciones. Fue un evento iniciado al atardecer con nutrida concurrencia en la que estuvo presente el gobierno nacional encabezado por el Presidente Lacalle Pou, otras autoridades y gente vinculada directa o indirectamente al tema portuario.
El ingreso de la ganadería por Hernandarias en nuestras praderas, a la que se sumó luego el desarrollo agrícola y el forestal; y el Puerto de Montevideo fundado por Bruno Mauricio de Zabala, han sido sustento material de nuestro estado nacional independiente. La ganadería con reconocimiento internacional, conoció un largo esfuerzo de varias generaciones de empresarios y trabajadores rurales. El Puerto de Montevideo y demás puertos comerciales del país conocieron tiempos de ineficiencia y caos sindical. Hasta que en 1991 bajo la Presidencia del Dr. Luis A. Lacalle Herrera se dictase la Ley de Puertos que pasó la tarea portuaria al sector privado. Promoviendo su competitividad y la prohibición de la interrupción de los servicios portuarios. Especialmente en la carga y descarga de mercaderías.
Bajo la Presidencia del Dr. Jorge Batlle, en favor de la competitividad, en 2001, se hizo una licitación abierta y pública, para la compra de 80% de las acciones de TCP S.A. Sociedad que tendría la concesión de la terminal única de contenedores del Puerto de Montevideo. El grupo encabezado por Katoen Natie multinacional belga de prestigio y presencia mundial en materia portuaria resultó ganadora. A cambio debía realizar grandes inversiones en muelles, dragado, instalaciones, etc. Lo que ya se hizo.
El contrato fue violado durante la administración del gobierno frenteamplista y abrió cauce a una reclamación de volumen cuantioso contra el Uruguay. Que se clausuró con un acuerdo de concesión por 50 años, que implica una inversión transformadora próxima a los 600 millones de dólares. Plazo autorizado por la legislación que promoviese el gobierno del Dr. Tabaré Vázquez y que su administración acordase con la finlandesa UPM para la inversión actualmente en curso.
En el acto citado habló el Presidente Lacalle y el Ministro de Transporte y Obras Públicas José L. Falero. También representantes del grupo belga Katoen Natie, que es una empresa familiar. La transformación que tendrá el Puerto es extraordinaria. La visión de Karl Hust, Presidente de TCP S.A. merece cita especial. Atendiendo a la situación regional recordó que el Puerto de Montevideo está a solo 58 kms. del mar (Océano Atlántico) mientras que Buenos Aires debe dragar 300 kms. para llegar a él. Que hoy Uruguay tiene un calado (profundidad) de 13 mts. que pronto pasará a 14 mts. mientras que Buenos Aires nunca podrá llegar a más de 10 mts. Recordó -por otra parte- que mientras el clima de Montevideo es benigno, el puerto de Santos, en Río Grande, Brasil, potencial competencia regional debe cerrar promedialmente 45 días al año por tormentas (“Inversión de Katoen Natie ayudará a la producción”, E. Barreneche, El País, 4/03/23).
Por lo dicho, los barcos de carga de mayor tamaño y calado que ya operan en el globo, podrán operar en Montevideo, en carga y descarga para la Cuenca del Plata. Con beneficio para los uruguayos.