por László Erdélyi
.
La energía nuclear es una realidad en Argentina y Brasil, sin llegar al desarrollo que tiene en Estados Unidos y en Europa, produciendo energía eléctrica (y también material para bombas atómicas à la carte). Por razones de costo las compañías del hemisferio norte subcontratan personal de carácter temporal, zafral, que para sobrevivir van de planta en planta nuclear buscando la changa. Llevan consigo a veces a sus familias, y viven en trailers. La novela La Central, de la francesa Élisabeth Filhol, tiene como protagonista a Yann, uno de estos trabajadores.
Bien escrita, con una narración que fluye y mece al lector, la novela introduce de forma suave y musical a una realidad tremenda, ominosa, la de una industria peligrosa sometida a rigurosos protocolos de seguridad, procesos que terminan agobiando hasta límites indecibles la psiquis del trabajador. Más la de aquél que, por un breve accidente o descuido, recibió más contaminación radiactiva que la permitida (algo habitual), y debe someterse a largos procesos de descontaminación. Es el caso de Yann, cuyo relato en primera persona es casto, seco, como pinceladas precisas que en una frase explican mundos, y éstos estallan nítidos en la cabeza del lector. Se nota la tarea del traductor, Rubén Martín Giráldez, respetando sobre todo el ritmo y la cadencia musical de la narración original.
La radiación es un veneno que late a metros de quienes allí trabajan, uno invisible que tomará de tí todo lo vital ante el menor traspié. La vida en los trailers, a su vez, posee una artificialidad nada hogareña; es una suerte de no lugar muy a lo Marc Augé, muy bien retratada en la película Nomadland (2020), sobre los trabajadores precarizados e itinerantes de las plantas distribuidoras de Amazon, protagonizada por una notable Frances McDormand.
Lo introspectivo del relato deja paso, en el capítulo 15, a un texto asombroso: la explicación en términos físicos, para un público lego, de cómo se genera la energía eléctrica en los núcleos de estas centrales, los pro y contras de los diversos diseños de reactores, y por qué ocurrió la tragedia de Chernobil. Son seis carillas que explican, a nivel ciudadano, las circunstancias de esta monstruosidad, y su frágil estabilidad.
LA CENTRAL, de Élisabeth Filhol. Anagrama, 2024. Barcelona, 132 págs.