por Juan de Marsilio
.
La obra y la persona del poeta Elías Uriarte (Rocha, 1945) son de culto para no pocos poetas de las generaciones literarias surgidas luego de la dictadura. Con tres libros publicados, Trabahombre (1978), Breviario de la peste (1986) e Hiroshima (1999), en su nuevo poemario, Poesía, incluye textos de esos volúmenes.
Son textos que tienden a lo aforístico, aunque no todos (algunos están en prosa). La mayoría son, según la contratapa, de “poesía sucinta escrita en tres, dos o a veces un solo verso”. O en pocos versos más, y de pocas sílabas.
Uriarte también ha publicado poemas extensos de gran calidad. Es capaz de decir mucho, y de sugerirlo, con muy pocas palabras. Así por ejemplo, para mostrar el aumento de sensibilidad que la lejanía produce en los exiliados, le basta escribir en este poemario:
“Es como si siempre nos hubiéramos conocido”; dicen los que se aman en el exilio.
Pero no sólo con la experiencia del exilio —el poeta residió diez años en Alemania— logra Uriarte una rotunda y certera concisión. También sabe trasuntar, sin sensiblería, el horror cotidiano del período de facto:
¿Quién será,
ahora me pregunto,
quién será;
a quién
las mismas manos,
los mismos rostros
asesinos;
ahora,
en este cuarto,
o en la casa
del vecino?
¿Quién será,
cuáles sus palabras,
los golpes,
los silencios;
los mismos antiguos
silencios;
ahora,
ahora mismo,
en ese cuarto,
o en la casa
del vecino?
Cabe esperar que algún editor se atreva a reeditar los libros anteriores de Uriarte, inencontrables en la actualidad, salvo en ferias y librerías de viejo.
POESÍA, de Elías Uriarte. Paréntesis, 2022. Montevideo, 112 págs.