Ana Obregón: una madre que carga con la peor de las tragedias

La vida de la actriz española está plagada de éxitos y de sinsabores; cumplió la voluntad de su hijo de tener una niña y encendió el debate.

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Ana Obregón y su hijo Alessandro.
Ana Obregón y su hijo Alessandro.
Foto: Instagram @ana_obregon_oficial

Ana Obregón es uno de los grandes iconos de la televisión española. Recordada por estos lares por ¿Qué apostamos? o Ana y los siete, acumula una larga lista de proyectos laborales que van desde Los Magníficos (1985) hasta la conducción del especial de Las Campanadas de Televisión Española la pasada Nochevieja.

A pesar de sus triunfos profesionales y su vigencia a lo largo de los años, la actriz y conductora -pero también bailarina, escritora, guionista y licenciada en Biología- ha sufrido duros golpes como la muerte de su hijo en 2020 y hoy es centro de debate porque primero se creyó que se había convertido a sus 68 años (71 años, según detractores) en madre de una niña por subrogación de vientre en Estados Unidos, una práctica que es ilegal en España, pero resultó que es la abuela.

Antoñita, la fantástica.

Ana Victoria García Obregón nació el 18 de marzo de 1955 en el seno de una familia acomodada madrileña. Desde niña fue apodada como Antoñita, la fantástica, puesto que desde temprano demostraba que lo suyo era el espectáculo. Primero fue el ballet clásico, luego el piano, el arte dramático, el jazz y la danza moderna. Al mismo tiempo que estudiaba en la Universidad Complutense de Madrid, asistía a cursos de moda e interpretación. Probó suerte en el modelaje en Londres y a finales de la década de 1970 logró debutar en la película Sentados al borde de la mañana con los pies colgando del director Antonio José Betancor; le siguió Tres mujeres de hoy y una decena de títulos. En 1984 filmó Bolero con Bo Derek y se instaló en Hollywood. Más tarde, el destino la llevó a Italia. Allí obtuvo un papel en la serie Regálame un sueño con Gianni Morandi y trabajó junto a Peter Fonda en Sound en 1987.

Su llegada al estrellato indiscutido fue como presentadora de ¿Qué apostamos? junto a Ramón García -una pareja televisa que fue un boom- y desde ahí dominó la década de 1990 y la del 2000. La serie Ana y los siete, emitida entre 2002 y 2005, enamoró a familias del mundo entero (el capítulo final fue visto por seis millones de personas solo en España).

Pero en asuntos del corazón, Obregón no ha tenido demasiada suerte y eso ha alimentado horas y horas de los programas de chimento en su país. Uno de sus primeros amores fue el jugador de básquetbol Fernando Martín, quien falleció en un accidente de tránsito siendo muy joven. También fue novia durante cuatro años del cantante Miguel Bosé. De él ha dicho: “Forma parte de mi vida, de mi infancia. Forma parte de mí. Es un hombre con mucho carisma”.

Años después se abrió de nuevo al amor y comenzó una relación con el conde Alessandro Lequio -primo del rey emérito Juan Carlos I-, padre de su hijo, Alejandro, con el que vivió varias polémicas e infidelidades pero con el que mantiene una correcta relación hasta el presente.

Sus futuras parejas también terminaron en decepciones: el príncipe Alberto de Mónaco, el torero Israel Lancho, el exfutbolista Davor Suker, el actor Micky Molina, el modelo polaco Dereck Miroslaw y un affaire del que poco se sabe con David Beckham (y el que desató la furia de Victoria).

En la actualidad se desconoce si tiene pareja pero ella misma ha asegurado que no se cierra a encontrar al amor pero no está pensando en eso. Así lo dijo a El País de España hace unos días: “Para mí ahora mismo el tema sexo, erotismo, atracción, hombres, es como si me hablaras de Marte: no puedo estar más lejos de todo eso”.

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Ana Obregón con Steven Spielberg
La primera de muchos en Hollywood

En 1984, Ana Obregón aterrizó en Hollywood con su valija cargada de ilusiones. Sin saberlo, la madrileña precedió a actrices como Penélope Cruz, Elsa Pataky y Paz Vega en su conquista de Estados Unidos. Incluso llegó antes que Antonio Banderas. Una de las personalidades con las que tuvo contacto al principio fue el director Steven Spielberg, a quien había conocido en Londres unos meses antes. Gracias a él -para quien cocinó una paella siguiendo las instrucciones de su madre por teléfono y que ha confesado que quedó espantosa-, fue a su primera fiesta en Hollywood y compartió mesa con Barbra Streisand, Linda Evans y Francis Ford Coppola, entre otros.

Su debut cinematográfico en la meca del cine fue como coprotagonista de la película Bolero junto a uno de los sex symbols más importantes de la época, Bo Derek.

En esos años, también participó en las series episodios de Hospital General, Los Magníficos y ¿Quién Manda a Quién?

Una anécdota que siempre recuerda es que en Los Angeles la detuvo la Policía por creer que era una prostituta. Obregón iba caracterizada como una porque iba a una audición para ese papel. “De repente me para un coche de Policía y me dice ‘no puedes trabajar aquí’. Y digo: ‘¿Trabajar?’ Que voy a un casting, que soy actriz, y me dice ‘ya, eso decís todas’. Y me metieron al coche. Acabé en Beverly Hills y encima no me dieron el papel”, contó en una entrevista en RTVE.

El duelo.

Su verdadero amor, en realidad, ha sido su hijo. “Es el gran hombre de mi vida”, respondía siempre Obregón cuando se le preguntaba por él. En 2018, lo que comenzó con lo que parecía ser, según sus palabras, “solo un tirón de espalda”, terminó convirtiéndose en un sarcoma de Ewing, un cáncer que afecta al hueso o los tejidos blandos alrededor de ellos. El 13 de mayo se cumplen tres años de su muerte, a los 27. Desde entonces, ella ha dicho que ha vivido en una profunda tristeza de la que aún trata de recuperarse.

El cáncer no le era ajeno. Ella padeció un tumor en el duodeno a los 13 años y un tumor en el útero a los 28.

En esa misma entrevista, que concedió dos semanas antes de conocerse el nacimiento de su hija en Estados Unidos, confesó: “Para trabajar me disfrazo de la Obregón y tiro para adelante, porque Ana ha muerto y ahora es otra. Las lágrimas no se acaban. Las fases del duelo son mentira. Yo, además, he perdido en dos años a mi hijo, a mi madre y a mi padre. El duelo es un camino solitario y la única forma de luchar contra el dolor es no luchar. Lo peor que te pueden decir es: ‘Sé fuerte’. No se me han secado las lágrimas por mi hijo y aún no he llorado ninguna por mis padres. Alguien me escribió por las redes algo que me llegó al alma: ‘Hay dos clases de personas en el mundo, las que han enterrado a un hijo, y las que no’. Yo soy de las primeras y lo seré siempre. Lo único que voy a aceptar es que no lo voy a aceptar nunca”.

En homenaje a su hijo, Obregón creó la Fundación Aless Lequio para ayudar a la investigación contra el cáncer. El 70% de sus ingresos está destinado a esta causa. También terminó de escribir un libro que él había iniciado y será publicado este año.

Tapa de la revista ¡Hola! con la maternidad a los 68 años de Ana Obregón por gestación subrogada en Miami
Tapa de la revista ¡Hola! con la maternidad a los 68 años de Ana Obregón por gestación subrogada en Miami.
Foto: EFE

Volver a vivir.

La angustia que le provocó la pérdida de su hijo, madre y padre en tan poco tiempo la llevó a tomar la decisión de criar a una nueva hija-nieta a los 68 años. “Llegó una luz llena de amor a mi oscuridad. Ya nunca volveré a estar sola. He vuelto a vivir”, posteó en su cuenta de Instagram al presentar a la bebé que nació el 20 de marzo y se llama Ana, nombre que significa “piadosa, misericordiosa, bendecida por Dios”.

La noticia, exclusiva de la revista ¡Hola!, causó polémica en España, dado que la subrogación de vientre está prohibida por la ley (aunque se reconocen a los hijos nacidos de gestación subrogada en virtud de una norma aprobada en 2010, que supone una opción legal, pero solo válida para algunos casos: aquellos en los que hay una decisión judicial previa sobre la filiación en el país donde se lleva a cabo el proceso). En el debate ha intervenido incluso el gobierno. La ministra de Igualdad, Irene Montero, recordó que se trata de una “forma de violencia contra las mujeres” que se alimenta de la pobreza de las gestantes. La titular de Hacienda, María Jesús Montero, la calificó de “explotación del cuerpo de la mujer”.

Ana Obregón tapa de Hola
Ana Obregón tapa de Hola
Foto: Captura

Una semana después, también en ¡Hola! la actriz salió al cruce y aclaró que es su nieta; es hija de su hijo, donante de esperma. “Esta fue la última voluntad de Aless, la de traer un hijo suyo al mundo”, aseguró.

La revista escribe: “Nos cuenta que es una niña muy buena, comilona, dormilona y tranquila. Que, aunque han pasado 30 años desde que fue madre por primera vez, esto no se olvida. Que se ha convertido, de nuevo, en una experta en cambiar pañales, dar biberones y cuidar de su bebé. Duerme poco, vigila el sueño de su pequeña, dice que tiene ojeras y que hace semanas que no va a la peluquería”.

Desde las redes hasta el noticiero, desde los famosos a los anónimos, no ha quedado nadie que no haya dado su opinión sobre esta decisión personal de la conductora de ¿Qué apostamos?

(Con información de El País de España)

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