Si bien en destinos como Barranquilla, Cartagena y Aracataca en Colombia, se encuentran recorridos fascinantes con los cuales se logra entender el universo literario plasmado dentro de la narrativa del impulsor del realismo mágico, Gabriel García Márquez, es el tour de Macondo, que se realiza en su pueblo natal, ubicado a 86 kilómetros de Santa Marta, el que más llama la atención de los turistas extranjeros que llegan a Colombia y están interesados en realizar este tipo de turismo.
Aunque Macondo, según palabras del escritor, “no es tanto un lugar como un estado de ánimo”, en el recorrido que se realiza en Aracataca, se encuentran lugares e historias que fueron relevantes en la creación de este pueblo imaginario, que es conocido en diferentes países del mundo.
Civitatis, la plataforma online líder de visitas guiadas y excursiones en español, compartió los puntos claves del tour de Macondo, los cuales son significativos y están reflejados en la obra más galardonada del escritor, Cien Años de Soledad, recientemente adaptada por Netflix.
Estación del ferrocarril
“El tren amarillo llega a Macondo a las 11 de la mañana y transporta a aventureros, ultramarinos, telas, champaña y brandy”, esta es alguna de las frases en donde el escritor hacer referencia a la importancia del tren que llegaba a Macondo. Asimismo, vivió una situación similar durante su infancia en Aracataca, la construcción de la estación de ferrocarril en la década de 1920 llevó desarrollo al pueblo al conectarlo con diferentes lugares del país, lo que favoreció la activación del comercio en la zona.
La calle de los turcos
A inicio del siglo XX, Aracataca, acogió a migrantes del Medio Oriente, aunque muchos de ellos eran palestinos o libaneses, llegaron con pasaporte de Turquía, por lo cual recibieron desde esa época el gentilicio de turcos, el cual aún es utilizado de forma coloquial en diferentes lugares del caribe colombiano. Al igual que en Aracataca, este grupo de familias también llegaron a Macondo y se ubicaron en una zona dedicada al comercio conocida como la calle de los turcos, así lo expresó García Márquez en el libro.
Parque de Remedios la Bella
El personaje de Remedios la bella, fue alimentado, según cuenta García Márquez, por la historia de una joven de Aracataca, quien a diferencia del personaje ficticio del libro que murió virgen, la real, se fugó con su amante. Ante esta situación y aunque todo el pueblo conocía la verdad, la abuela para evitar la deshonra en su familia, contó con mucha firmeza que su nieta había subido al cielo como lo hizo la virgen María.
Museo García Márquez
Los primeros años de vida del escritor alimentaron su imaginación para crear el maravilloso “Realismo Mágico” que caracteriza sus libros. Aunque la casa real en donde Gabo pasó su infancia fue demolida, este museo es una réplica de aquella casa, en donde escuchó de su abuelo historias de la guerra de los mil días, también relatada en Cien Años de Soledad. Además, en este lugar se ha recreado diferentes fragmentos y espacios que forman parte del libro, como el fresco corredor decorado con begonias, en donde las mujeres de la familia se sentaba a tejer o el cuarto de los trastos, espacio prohibido para el pequeño Gabriel, los cuales tienen presencia en el libro como el corredor de begonias de la casa de los Buendía y el cuarto de Melquíades, respectivamente.