El cometa más famoso

Compartir esta noticia
Misiones espaciales pudieron fotografiar al Halley en todo su esplendor.

Hace 30 años un nuevo pasaje de Halley causaba una gran expectativa en todo el mundo y también conmovía a Uruguay.

DÉBORAH FRIEDMANN

En marzo de 1986 Ernesto tenía 9 años y se había emocionado con todos los anuncios que rodeaban el avistamiento del cometa Halley. Incluso en su escuela habían colocado telescopios a disposición de padres y alumnos para verlo en las mejores noches. Una previa también con mucha expectativa recuerda Andrés, de entonces 13 años. Un aficionado a la astronomía que vivía en Punta Carretas había instalado un telescopio en la rambla y Parva Domus. Se formó una pequeña cola de gente para ver a través del lente y alguien contó un chiste, que en ese entonces se hacía con frecuencia en Decalegrón, y despertó la risa general: "Yo sabía que esta democracia iba a traer cola". Luis, con 24 años en aquel momento, tenía mucha curiosidad por el fenómeno. La abuela de su cuñada, recuerda, contaba que lo había visto pasar en 1910, durante su infancia, y que el Halley se divisaba incluso de día. Así que cuando anunciaron que se veía fue hasta Trouville, un punto menos iluminado que otros en la rambla montevideana, para observarlo.

Ellos tres, como muchos tantos uruguayos, tenían gran expectativa por el pasaje del cometa Halley. Y también, como tantos, se desilusionaron. "Lo que vi fue una estrella como cualquier otra y de la cola famosa jamás me enteré. No volví a interesarme en la astronomía hasta cuarto de liceo, cuando era una materia obligatoria", recuerda Ernesto. Andrés dice casi las mismas palabras: "Lo que se veía en ese telescopio, que tampoco era muy grande, era una total decepción: un puntito con una nebulosa a su alrededor. Nada de cola, como se había anunciado". Y Luis recuerda algo similar: le costó encontrarlo y cuando lo hizo distaba de ser el espectáculo que se esperaba. Lo que vio era una imagen borrosa, algo mayor a una estrella.

Ese sentimiento fue la tónica general, coinciden Oscar Méndez, director del Planetario de Montevideo, y Carlos Cladera, presidente de la Asociación de Aficionados a la Astronomía del Uruguay. En un mundo donde no existía Internet y un país donde la televisión empezaba a las 17 horas, la temperatura era cálida y la democracia estaba recién reestrenada, la gente se acercaba a las actividades que sorprendían y unían como el Halley.

"Su anterior pasaje, de 1910, fue especialmente espectacular, pasando tan cerca de la Tierra, que nuestro planeta atravesó la cola del cometa. Además, por esos años la gente en Uruguay estaba ávida por experiencias colectivas, habida cuenta de la reciente apertura democrática", señala Méndez. Y agrega: "Quizá la historia de este cometa, ligada al surgimiento de la ciencia moderna, y en especial a la teoría gravitatoria clásica de Newton, haya puesto al Halley en un lugar preponderante. El trabajo de Edmund Halley, contemporáneo y amigo de Newton, utilizó su teoría gravitatoria para deducir que varios cometas observados a lo largo de los siglos en realidad constituían un único objeto, luego conocido como el 1P/Halley". El 1 por ser el primero, P por periódico y Halley por su descubridor.

En el mismo sentido, Cladera señala que este cometa es el más importante de nuestra historia. Halley no solo aplicó la fórmula de Newton y descubrió que sus ondas eran elípticas al igual que los planetas, sino que determinó que uno en particular tenía un período orbital de aproximadamente 75 años. Así predijo su retorno para 1758, el momento del año en que aparecería y la zona del cielo.

"El principal aporte del cometa Halley no va de la mano de su composición, sino que gracias a los estudios antes mencionados la humanidad pudo saber con certeza cuál era la mecánica celeste en torno a la aparición de los cometas. Antes de los cálculos de Halley, los cometas aparecían de la nada y volvían a desaparecer, anunciaban guerras, pestes, la caída de algún imperio, la muerte de un rey, carecían de explicación y lógica, precisamente por su comportamiento y forma. A partir de Halley se sabe que son un cuerpo celeste más, fin del misterio y el miedo", afirma Cladera.

Investigación.

Toda esa expectativa que había en torno al pasaje del Halley llevó a que la Asociación de Aficionados a la Astronomía organizara el evento "Encuéntrese con Halley" patrocinado por Kodak, El País y Teledoce. Consistía en invitar al público a acercarse por las noches al jardín del Planetario, en donde se instalaron telescopios para que todos pudieran acercarse un poquito más al cometa, recuerda Cladera. Incluso, rememora Méndez, hubo un vuelo especial de Pluna para poder observar el cometa y una cobertura muy importante de medios de comunicación.

El viernes 7 de marzo, por ejemplo, El País titulaba en su portada "El cometa Halley ya es visible a simple vista; pero solo para los madrugadores". Un día más tarde este diario anunciaba: "Mejoran desde hoy las condiciones para observar a simple vista el Halley" y el 11 de marzo ilustraba la edición una fotografía del cometa en todo su esplendor lograda en Melo por el profesor Carlos Gereda.

Más allá de la decepción de muchos con lo que vieron del Halley, otros, como Cladera, no recuerdan una frustración especial por eso. "En astronomía, siempre hay algo más para encontrar que nos termina fascinando. Tan solo un año más tarde fue una supernova en una de las famosas nubes de Magallanes", comenta.

Además, ese pasaje del Halley tuvo importancia científica. Fue el primero en ser investigado por sondas espaciales: la soviética Vega, la japonesa Suisei y la europea Giotto alcanzaron las cercanías de su núcleo y registraron mediciones fotográficas y espectroscópicas inéditas hasta entonces. "El núcleo del Halley fue entonces el primero en ser fotografiado en la historia, presentando una forma alargada (8 x 8 x16 kilómetros aproximadamente), y un aspecto sorprendentemente oscuro, pues reflejaba apenas el 4% de la luz solar recibida, tan oscuro como el carbón que queda luego de hacer un tradicional asado. Muchas concepciones que se tenían por entonces sobre la naturaleza de los cometas se reformularon a partir de los datos recabados por estas sondas", afirma Méndez.

Convocan a quienes tengan fotografías.

La Asociación de Aficionados a la Astronomía y el Planetario de Montevideo organizan actividades relacionadas con los 30 años del pasaje del Halley. Por un lado, todos los viernes de abril se darán conferencias por parte del equipo docente del Planetario y científicos invitados. Además, la Asociación convoca a aficionados y profesionales que tengan imágenes del cometa a contactarse a través del 2622-1531 o administracion@aaa.org.uy. La idea es reunir todo el material posible y exponerlo a partir del 29 de marzo. Las copias se devuelven.

Lo que falta por saber.

Según Carlos Cladera, presidente de la Asociación de Aficionados a la Astronomía del Uruguay, hay dos grandes interrogantes respecto a los cometas. "Primero saber si son los responsables de la existencia de agua en nuestro mundo; al estar básicamente compuestos por hielo, se presume que fueron los transportadores del agua a la Tierra. Existe un interesante debate, incluso en el ámbito académico de nuestra Facultad de Ciencias, referido a la abundancia del deuterio respecto al hidrógeno en los hielos cometarios". De todos modos, solo se analizaron seis cometas de los millones que existen, apunta.

Otra discusión abierta en el ámbito científico es saber si los cometas transportan en su hielo algún tipo de sustancia orgánica y, por ende, que sean los responsables de la vida en la Tierra.

Dos que van a pasar cerca.

Para este mes se anuncia que dos cometas con órbitas similares se están acercando a la Tierra y uno de estos pasará lo más cerca que se ha registrado en los últimos 246 años. Se trata del conocido como 252P/LINEAR 12, que estará acercándose a la Tierra el 21 de marzo. Pasará a 5,3 millones de kilómetros, lo que equivale a 14 veces la distancia Tierra-Luna. "Ambos cometas pasarán relativamente cerca de la Tierra, pero el brillo previsto hasta ahora para ambos objetos sería en principio decepcionante. De todos modos, la actividad de los cometas cuando están en las proximidades del Sol puede dar sorpresas", señala Oscar Méndez, director del Planetario de Montevideo. "La actividad cometaria es bastante difícil de predecir, por lo que los brillos estimados pueden ser menores o mayores en la realidad", agrega.

El eterno femenino de una imaginativa pintora
Misiones espaciales pudieron fotografiar al Halley en todo su esplendor.

Ciencia

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Astronomía

Te puede interesar