Esta semana llegó a los cines una de las películas más esperadas por los fanáticos de la música: Back to Black, la biopic de Amy Winehouse (fallecida en 2011), quien es encarnada por Marisa Abela, una actriz a la que se la pudo ver en la taquillera Barbie y que viene pisando fuerte en la industria del cine.

Marisa Abela tiene la misma edad que tenía Winehouse al momento de su muerte, cuando la intérprete de canciones como You Know I’m No Good y Love Is a Losing Game pasó a integrar el tristemente célebre “Club de los 27”, del cual también forman parte artistas como Jim Morrison, Brian Jones, Jimi Hendrix, Janis Joplin y Kurt Cobain.

Back to Black (nombre del segundo disco de estudio de Winehouse) fue dirigida por la cineasta inglesa Sam Taylor-Johnson en base a un guion de Matt Greenhalgh, cuyo debut cinematográfico fue una película biográfica del líder de Joy Division, Ian Curtis (Control, de 2007).

Abela tiene sangre polaca y rusa por el lado materno, y ancestros malteses y libios por parte paterna. Nació en Inglaterra el 7 de diciembre de 1996 y es hija de la actriz Caroline Gruber y del actor, director y productor Angelo Abela. Por este motivo, creció inmersa en el mundo del espectáculo, lo que le permitió comenzar su carrera actoral muy joven: apareció por primera vez a los 11 años como el personaje de Alicia en Man in a Box (2008).

Después de graduarse en la Real Academia de Arte Dramático (RADA), debutó en la televisión británica en 2020 con papeles principales en el thriller COBRA, aunque su salto a la fama ocurrió hace tan solo dos años en la teleserie de la BBC y HBO Industry, en la que interpreta a Yasmin Kara-Hanani, la hija subestimada de una familia rica libanesa que se codea con jóvenes aspirantes a ejecutivos en Londres. También ha participado en She Is Love, Rogue Agent y realizó la mencionada actuación en Barbie, la película.

En las botas de Amy

El filme Back to Black muestra la vida de Winehouse desde los primeros años de la artista en Londres, su meteórico ascenso al estrellato y cómo fue la creación de su icónico álbum de estudio que le da título a la película.

En la 50ª edición de los Premios Grammy (2008), Back to Black ganó cinco galardones, igualando el récord impuesto por Lauryn Hill, Alicia Keys, Beyoncé, Norah Jones y Alison Krauss por la mayoría de estatuillas obtenidas por una artista femenina en una sola ceremonia. Winehouse no pudo asistir a la gala ya que se encontraba en rehabilitación en Londres, aunque se la vio a través de una pantalla gigante.

El disco ganó por mejor álbum vocal pop, mientras que Rehab obtuvo el premio a la mejor interpretación vocal pop femenina, canción del año y grabación del año. A su vez, Winehouse ganó como mejor artista emergente. Y el disco recibió una nominación por álbum del año.

A finales de 2011, Back to Black fue anunciado como “el álbum más vendido en el Reino Unido en el siglo XXI” por la Official Charts Company, después de haber vendido 3,5 millones de copias en las islas británicas.

“He querido usar mi cuerpo como un instrumento”, llegó a reconocer Abela cuando se vieron las primeras imágenes del rodaje en Londres. Y esto se debe a que, como muchas otras biopic, su actuación protagónica va más allá de la personificación: la actriz logró emular la personalísima e incomparable voz de Winehouse, de la misma manera que el oscarizado Rami Malek puso su voz para hacer a Freddy Mercury en Bohemian Rhapsody, o Diego Boneta cantó las canciones de Luis Miguel en la serie de Netflix sobre su vida.

En una entrevista con The Guardian, la entrenadora vocal Anne-Marie Speed reveló algunos detalles del trabajo que hizo con Abela para esta película. Por un lado, la profesional destacó que entrenó “como una deportista” para lograr un buen desempeño. Por el otro lado, aclaró que la protagonista de Black to Black no emuló exactamente la voz de la cantante que hizo de los extravagantes peinados una marca de fábrica.

Las dos trabajaron juntas entre septiembre de 2022 y enero de 2023, cuando comenzó el rodaje de la película. Durante ese período, Abela no solo aprendió a cantar, sino también a tocar la guitarra y a dominar el acento de Winehouse, nacida en Southgate, en el norte de Londres, Inglaterra. Además, hizo un importante trabajo físico para reflejar los cambios de una cantante que se fue degradando paulatinamente por el consumo abusivo de drogas y alcohol.

“Es una preparación de tiempo completo, es como un atleta. La gente realmente subestima lo que puede ser la producción física de la voz. No lo ven, pero realmente lo es. Necesitas hacer que tu cuerpo funcione de la manera correcta para realmente soportar lo que está sucediendo y producir la voz”, dijo la vocal coach.

El personaje y la persona

Abela calificó a Winehouse como “valiente y fuerte”, y durante el proceso de preparación del personaje descubrió a la mujer que había detrás de la leyenda. “Me fue muy fácil empatizar con ella y entender que se trataba de una persona”, contó la actriz al periódico El Sol de México. Y agregó: “También tenía mucha apertura y necesidad de conectar con el mundo, y que el mundo conectara con ella. La mezcla de esa vulnerabilidad y necesidad de estar involucrada con la vida es algo que entendí y me hizo sentido”.

Al explorar su faceta profesional y personal, Abela declaró: “Tampoco había duda en mi mente que Amy tenía dolor y estaba vulnerable, porque lo vemos. Se trataba de experimentar esas cosas a través de ella”.

La película contó con el visto bueno de la familia Winehouse. Y hay quienes dicen que es una forma que halló el padre de la cantante, un ex taxista, para librarse de sus remordimientos. El actor Eddie Marsan se puso en los zapatos de Mitch Winehouse, quien es considerado por la opinión pública como uno de los causantes de la tragedia (junto a la expareja de Amy), pues se negaba a aceptar la adicción de su hija y a llevarla a rehabilitación.

Fue el 23 de julio de 2011 cuando el mundo recibió la sorpresiva noticia de que Winehouse fue hallada muerta en su domicilio, debido a un coma etílico que se dio después de un largo periodo de sobriedad.