¿Cómo fue que Blake Lively(37 años) pasó de ser una de las actrices más queridas entre las nuevas generaciones a tener que repensar su carrera por las muestras de rechazo que viene sufriendo en las últimas semanas?
La respuesta se centra en una sola cosa, el estreno de la película Romper el círculo.
Basada en el best-seller Its end with us —también título del film en inglés— de Collen Hoover, la película cuenta la historia de Lily Bloom, una mujer con un pasado en el que conviven un padre violento con su primera experiencia con el amor. El presente la encuentra como dueña de una florería e iniciando una relación con un hombre que terminará mostrando un costado oscuro.
¿Cuál sería el género de esta película? Pues allí está el quid de la cuestión: ¿comedia romántica para pasar el rato o un drama sobre la violencia doméstica? Por ahí es que pasan los análisis, cuestionamientos, críticas, polémicas y demás que dividen las aguas, colocando por un lado a la actriz protagonista y por otro a su coprotagonista pero también director y productor del largometraje, Justin Baldoni (ver recuadro).
Hasta entonces Blake no era dueña de una filmografía muy rimbombante, sus seguidores pasaban más por lo cosechado en las seis temporadas de Gossip Girl, una serie juvenil estrenada en 2007 en la que la actriz encarnaba a Serena van der Woodsen, una multimillonaria joven de 16 años viviendo su vida en un colegio de elite. La serie se impuso entre el público no solo por los enredos adolescentes que contaba, sino también por el look que las actrices del elenco fueron imponiendo.
Y, en ese sentido, Blake tenía madera porque también es modelo y gracias a la serie en 2007 consiguió su primera tapa de revista, en Cosmo Girl. Con el tiempo llegaría a ser la cara de Chanel (2011), algo que consiguió por insistencia del diseñador de la marca, Karl Lagerfeld, ya que a los directivos de la casa francesa no los convencía su belleza americana. Un año después fue la imagen de la nueva fragancia de Gucci y posteriormente encabezó la campaña Chime for Change de esta marca, destinada a recaudar fondos y crear conciencia de los problemas de la mujer en términos de educación, salud y justicia.
Como se ha dicho, en cine no resaltó mucho, pero varios de los films en los que participó no pasaron desapercibidos. Por ejemplo, fue parte del elenco principal de las dos entregas de The sisterhood of the traveling pants (por la primera película fue candidata al Teen Choice Award como Revelación Femenina en Cine); fue muy elogiada por La vida privada de Pippa Lee (2009); trabajó bajo las órdenes de Ben Affleck en Atracción peligrosa (2010) y de Oliver Stone en Salvajes (2012), y desarrolló quizás uno de sus papeles más destacados en El secreto de Adaline (2015).
En este último drama romántico encarnaba a una mujer de 29 años que, a raíz de un accidente de tránsito, se volvía inmortal y vivía oculta para que nadie descubriera su secreto, hasta que el amor la desafía a salir al mundo.
Pero quizás la película que la actriz recuerde con más cariño sea Linterna Verde, porque allí conoció a su actual esposo, el actor Ryan Reynolds, padre de sus cuatro hijos: James (10), Inez (8), Betty (5) y el único varón, Olin (1).
Blake también proviene de una familia numerosa ya que es la más chica de cinco hermanos que, como sus padres (ambos actores), se dedicaron todos al mundo del entretenimiento.
Volviendo a Reynolds, la actriz le contó a la revista People que cuando empezaron a salir él le mandaba un ramo de flores todas las semanas que escondía una frase sobre algo que había ocurrido en esos días. “Algo gracioso o emotivo que alguno de nosotros había dicho”, relató sobre el detalle que realmente la enamoró.
Al año de conocerse ya estaban casados y juntando una popularidad y fortuna que hoy los ubica como uno de los matrimonios más adinerados de Hollywood.
Por ejemplo, en agosto la pareja lideraba los primeros puestos de la taquilla internacional, ella con Romper el círculo y él con Deadpool & Wolverine. Esa situación no se daba desde que en julio de 1990 la pareja de Demi Moore —con Ghost— y Bruce Willis —con Duro de matar 2— se hizo dueña de las carteleras alrededor del planeta.
Romper el círculo lleva recaudados más de US$ 242 millones, contra una inversión de US$ 25 millones. Cualquiera estaría tentado de hacer la segunda parte y Baldoni tiene los derechos para llevarla adelante, el problema es que hoy no están dadas las condiciones.
Una fuente cercana a Blake le manifestó a The Daily Mail que la actriz “está definitivamente triste por el odio que está recibiendo y está tratando de que no la afecte, pero lo hace”.
También se ha dicho que le ha pedido consejo a su gran amiga Taylor Swift, a quien dirigió en su debut como realizadora, en el video musical I bet you think about me.
Por el momento Blake no se ha pronunciado sobre la polémica, incluso hace un tiempo que no publica en su Instagram. Más de 45 millones de seguidores esperan por su reacción.