OPINIÓN
No podríamos haber imaginado los desafíos que hoy se le presentan a la política, la sociedad y la economía.
Se trata de problemas que son difíciles de abordar desde las ideologías, creencias, incluso desde la ciencia. Las alternativas de políticas públicas quedan interpeladas en la perspectiva de esos nuevos desafíos.
El descreimiento que se observa en la región y en estas sociedades, se genera por un deterioro acumulativo en lo social, institucional, político y en la economía. La red de contención es más virtual que real y se complejiza por el predicamento y simplismo de algunas ideologías de extremos.
A esta situación se agrega la actual recesión de los mercados regionales, con desempleo creciente y un déficit acumulado de los sistemas de infraestructura social (mala gestión, déficit de inversión y falta de visión), que queda de manifiesto por una pandemia que alteró el statu quo.
Equipo
Como si todo esto fuera poco, nos encontramos en un cambio de Gobierno, luego de una engañosa transición y dilatada trasmisión. Una de las dificultades para encarar los nuevos desafíos son las restricciones para definir equipo, luego del reparto político y de una negociación incómoda. Aun hoy, no se han podido resolver todos los cambios de equipos responsables en distintas unidades. Las nuevas necesidades de recursos y tiempos por el COVID-19, demoran los ajustes organizacionales y operativos necesarios para poder llevar a cabo esos desafíos.
Esto conlleva dificultades de funcionamiento en el ámbito de todo el Estado. Más allá de las apariencias, la opacidad de la transición, los desatinos de la gestión anterior y la presencia aun de actores que son parte de los procesos a valorar, ha llevado a demoras, rispideces evitables y la necesidad de encarar auditorías.
A continuación, algunos temas concretos que son parte de los desafíos y también, de incumbencia de todos.
UPM y cuentos chinos
Estos días, se presentaron las “economías” que se habrían generado en la renegociación con UPM (U$S305:mil) y nadie quiere apearse de este “logro”. Preferimos ser cautos, sabiendo del celo excesivo con esta información. A esta altura, hay necesidad de saber con detalle todo lo que se negoció. Los beneficios concedidos, respecto de una Pyme cualquiera, son chocantes, por lo que se impone conocer, cuanto antes, los detalles de cuanto patrimonio cedimos por “necesidad” (1) .
No se puede disimular el impacto económico que tuvo para el país la cadena forestal en base a incentivos (Ley de Forestación 1987, Zonas Francas 1987-2017, Canje de Deuda años ´90, Inversión en Ferrocarril Central que beneficia directamente a UPM). ¿Valía la pena?, quizás sí, pero está claro que estos emprendimientos no sobreviven las reglas del mercado, por tanto, bienvenida la discusión sobre las bondades del acuerdo. Hemos naturalizado por 30 años beneficios focalizados en las grandes empresas y en un tipo peculiar de empresas, creemos que llegó la hora de pasar raya y ponderar.
PPP y más chinos
El Ministro de Transporte trasmitió su intención de utilizar todos los mecanismos para dar impulso a la infraestructura, incluido las PPP, sin embargo, destacó, existen resistencias en el propio MTOP. De hecho, el Ex Ministro nunca lo adoptó de buena gana, quizás no entendió ni compartió sus virtudes, pero, extrañamente, a días de su salida, reconoció su utilidad. Fue clave su insistencia para que el Ferrocarril Central lograra un mecanismo ad-hoc para agilitar su ejecución, artilugio este que se podría aplicar al resto (2) .
Es un instrumento extendido en el mundo, aprobado por el sistema político, que se apoya en experiencia internacional, pero, obviamente limita la capacidad de maniobra y obliga a depender de otros organismos (3) . Puede ser más caro linealmente analizado y tomar más tiempo al inicio del aprendizaje (etapa ya cumplida en Uruguay, con 14 proyectos iniciados, la aprobación de fondos de CAF y el expertise de CND y el resto del sistema). Si bien en algún informe del BID se reconoce que este instrumento no previene contra la corrupción, en parte la ahuyenta y la mitiga (4) .
Vergüenza ajena
Un proyecto hegemónico de Nación supone 7 núcleos: 1º. Recaudación y gasto social; 2º. producción, finanzas y aparato empresarial del Estado; 3º. inserción del país; 4o. ciencia, tecnología y educación; 5º. sectores críticos: salud, seguridad; 6º relacionamiento Estado-Sociedad, iniciativa privada-regulación de mercados y 7º salvaguarda de derechos, equilibrios y desigualdades (5) .
Hace 5 años, cuando despuntaba el gobierno de Vázquez, frente a aquellos desafíos, creímos que el gobierno conocía su responsabilidad y señalábamos que los marcos normativos de áreas estratégicas se habían sostenido con apoyo de amplios sectores. Era tiempo de construir confianza y dar señales, desactivando expectativas negativas y contradicciones. El FA fracasó, pero, tiene hoy, la chance de apoyar iniciativas de largo aliento, incluidas en la LUC. Tenemos la expectativa de que la discusión parlamentaria modere sus aristas más irritantes (extensión e inclusión de contenidos de poca monta).
La coalición ganó el derecho de fijar agenda y el FA puede acompañar y reconocer que no tuvieron la cohesión y visión para proponer algo equivalente hace 5 años y luego se repitieron en su afán recaudatorio, laxitud con la delincuencia y corrupción, gastos sin sentido y “sutil” cercenamiento de libertades.
(1) Esto no surge de la información pública publicada o colgada en la Web
(2) Se llevó a cabo un cierre financiero sui-generis que permitió el inicio de obras antes de lo previsto según calendario
(3) El Ministerio de Transporte y Obras Públicas es el área en la que se maneja la mayor cantidad de recursos no inerciales de un Gobierno, por tanto el poder que tiene es enorme
(4) Los mayores hechos de corrupción en Latam no estuvieron asociados a la modalidad APP, el caso de Argentina es un ejemplo claro. Históricamente las modalidades tradicionales han sido un ámbito, entre otros, para repartir favores y territorios entre empresas, favorecer oferentes, traficar sobornos y dar lugar a contrataciones condicionadas y finalmente dan mucho el poder a las Dependencias de los Ministerios de Obras o los organismos competentes para manejar recursos a discreción si no hay un control claro
(5) Ver notas y reflexiones de Leandro Santoro (lúcido diputado argentino, ex radical y asesor de Alberto Fernández