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Chile, Argentina, Paraguay, Brasil, Perú, Panamá, El Salvador, Guatemala, Costa Rica, China, Reino Unido, Sudáfrica, Malasia y Singapur. Esta es la lista de países que recibirán café tostado elaborado 100% en Uruguay, en la moderna planta que Nestlé inauguró en 2018 tras una inversión de unos US$ 23 millones.

El negocio explotó tras una segunda ola de inversiones de unos US$ 7 millones en 2019 para ampliar la capacidad productiva. Esto se dio luego de firmar un acuerdo con la multinacional Starbucks, que forma parte de una alianza cafetera global entre ambas compañías con la que Nestlé se hizo de los derechos para comercializar los productos de café o té para venta directa al consumidor y canales food service en todo el mundo.

La planta quedó acondicionada a fines de 2020 y este año comenzó la primera producción de café tostado que llegará a 600 toneladas, de una capacidad productiva instalada de unas 5.500 toneladas.

Según el ejecutivo, el acuerdo con Starbucks fue clave porque «llamó la atención» de varios mercados. Además, a los productos de esa marca, se sumaron varios de la grifa Nescafé, tanto del sector out of home como retail.

«Hicimos una inversión importante hace tres años para crear una fábrica moderna de producción de café tostado; en paralelo, compramos los derechos de la marca Starbucks. La combinación de los dos acciones, la fábrica competitiva a nivel global y tener esta marca global junto con marcas locales, creó oportunidades de desarrollo para esta fábrica», dijo a El Empresario Laurent Freixe, CEO de Nestlé para las Américas.

Tras ganar los primeros mercados en la región y Sudáfrica, la compañía sumó negocios en Europa y Asia, adonde comenzará a exportar sobre fin de año.

«Este año empezamos con una perspectiva de un porcentaje muy bajo de producción y ocupación de la planta, y vamos a terminar exportando a más de 15 países. Hay una gran oportunidad de crecimiento en Uruguay considerando que este es el primer año. Además de liderar el mercado local, hay una ventana para posicionar al país en el mundo», remarcó.

A su entender, el país podría transformarse en referente para la compañía, porque «a la estabilidad que ofrece Uruguay» se suma un «equipo de Nestlé con know-how y expertise en café tostado y molido, la moderna fábrica y los acuerdos de libre comercio con muchos países, entre otras condiciones favorables para hacer negocios», enumeró Freixe.

La de Uruguay es una de las cuatro plantas de producción de café tostado de la compañía en el mundo. Las otras están Brasil, España y Portugal.