El fútbol femeninoaño a año crece en calidad y seguidores. Prueba de ello es el Mundial de la categoría, actualmente en disputa en Australia y Nueva Zelanda, que está acaparando millones de espectadores y de dólares tanto de las marcas como de la FIFA.
La entidad rectora del fútbol mundial definió una inversión en el torneo femenino que supera los US$ 500 millones.
Una parte de este monto irá directamente a las jugadoras. La FIFA fijó un pago de US$ 30.000 para cada futbolista por participar de la Copa del Mundo.
El salario promedio de una jugadora profesional es de US$ 14.000, por lo que desde la FIFA estiman el premio por jugar el Mundial un aporte positivo «en la vida y carrera» de las deportistas, dijo en junio el presidente del organismo, Gianni Infantino. «Las federaciones también percibirán cantidades históricas en función de su rendimiento en la competición, que podrán reinvertir en el fútbol de su país y que estamos seguros de que contribuirán a seguir impulsando el desarrollo del fútbol femenino», acotó.
La selección que se consagre como campeona del mundo recibirá un premio de US$ 4.290.000.
Las selecciones percibirán ingresos de acuerdo a su desempeño en la copa. La que se consagre campeona del mundo en la final de Sydney el domingo 20, ganará un premio de US$ 4.290.000, mientras que cada jugadora recibirá un cheque de US$ 270.000.
El combinado que salga segundo cobrará US$ 3 millones.
En total, se repartirán US$ 110 millones entre los participantes.
Hacen números
El Mundial masculino es un evento ecuménico en el que las marcas invierten cifras millonarias para exhibirse.
El Mundial femenino no atrae el mismo interés -e inversión- de las empresas, aunque sí es significativo. Coca-Cola, Adidas, Wanda Group y Hyundai/Kia fungen como «socios de la FIFA» en todos sus torneos, incluido el Mundial femenino. Además, Visa, Xero, Cosco, Globant, CommBank, Jacob’s Creek, Inter Rapidisimo y Team Global Express actúan como patrocinadores del evento, en tanto Unilever se sumó como otro aliado comercial.
En la edición anterior de la Copa del Mundo femenina, la FIFA facturó US$ 164,8 millones por derechos de marketing (los ingresos por el torneo de este año recién se conocerán en 2024).
![Gianni Infantino, presidente de la FIFA. Foto: EFE](https://imgs.elpais.com.uy/dims4/default/642a93a/2147483647/strip/true/crop/800x501+0+0/resize/800x501!/quality/90/?url=https%3A%2F%2Fel-pais-uruguay-production-web.s3.us-east-1.amazonaws.com%2Fbrightspot%2Fuploads%2F2017%2F09%2F10%2F59b4ba6fe5ed2.jpeg)
El ente rector del fútbol estima que la competencia tendrá una audiencia global de 2.000 millones de personas, superando así el registro de 2019 (1.120 millones) que significó un aumento de más del doble que el público en 2015.
Récords de asistencia en Australia y Nueva Zelanda
![Mundial femenino de fútbol 2023.jpg](https://imgs.elpais.com.uy/dims4/default/006ebba/2147483647/strip/true/crop/1280x853+0+0/resize/1280x853!/quality/90/?url=https%3A%2F%2Fel-pais-uruguay-production-web.s3.us-east-1.amazonaws.com%2Fbrightspot%2F3d%2F81%2F709b61634601bbf2f4f1c3db530b%2Fmundial-femenino-de-futbol-2023.jpg)
El Mundial femenino de fútbol es una sensación a nivel de público en los estadios.
El torneo -que está celebrando su novena edición- está batiendo récords de asistencia y ha logrado vender 1,5 millones de entradas para los partidos, según informó la FIFA en un comunicado.
El partido de la jornada inaugural del Mundial entre Nueva Zelanda y Noruega tuvo 42.137 aficionados en las tribunas, una cifra que significó un hito en materia de asistencia para un encuentro de fútbol (masculino y femenino) en el país.
Por su parte, el choque entre Australia e Irlanda en Sydney tuvo 75.784 espectadores, convirtiéndose así en el encuentro con mayor cantidad de público en la historia de los mundiales femeninos.
La primera ronda de partidos convocó a 459.547 personas, lo que da una media de 28.721 aficionados por encuentro, un aumento del 54% respecto a la misma etapa de la anterior edición del torneo, celebrada en Francia en 2019.
Pese a esa tendencia, los canales de televisión no hicieron grandes ofertas para hacerse con los derechos de emisión del torneo.
Infantino criticó a las cadenas de los países más futboleros -Reino Unido, Francia, Alemania, España e Italia- por ofrecer «entre 10 y 100 veces menos» para emitir el Mundial femenino comparado con la Copa masculina.
Esto llevó a que la FIFA ganara «solo» US$ 200 millones por esta vía, 100 menos que su objetivo.
Números al margen, el mundo del fútbol femenino espera por conocer a la selección campeona.