Liderazgo
El estilo de trabajo de este ingeniero industrial de la Universidad de Alabama permitió que Apple se conviertiera en la primera empresa en la historia de Wall Street en superar US$ 1 billón de capitalización
Pese a que suceder a Steve Jobs no parecía tarea fácil para Tim Cook, el actual CEO de Apple ha logrado mantener e incluso superar los éxitos conseguidos por el famoso fundador de la compañía creadora del Macintosh en los ochenta.
El ingeniero industrial de la Universidad de Alabama ha logrado dejar su marca dentro de la firma. Tanto así que días atrás se convirtió en la primera empresa en la historia de Wall Street en superar US$ 1 billón de capitalización bursátil.
Aunque en estos casi siete años de liderazgo y 17 dentro de la compañía Cook ha mantenido el legado de Jobs, ha sabido plasmar de diferente manera su cultura. Mientras que Jobs era conocido por su constante necesidad de innovar, perfeccionismo y altas expectativas en torno a sus colaboradores incluso con acusaciones de malos tratos—, la filosofía de Cook es completamente diferente.
Más ejecutivo y menos creativo, el actual líder de Apple ha sido reconocido entre sus pares por su transparencia, comportamiento calmo y trabajo duro (es el primero en llegar cada mañana y el último en abandonar las oficinas por la noche).
A esas cualidades se suma su capacidad de traspasar las millonarias ventas de la compañía y los dividendos recibidos por los inversores año a año, superando con creces lo hecho por su antecesor. Así, Cook se volvió uno de los favoritos de los mercados y tal vez, a nivel financiero, en un mejor CEO que el propio fundador de Apple.
Mientras que otros famosos líderes de tecnológicas como Elon Musk (Tesla) o Jack Ma (Alibaba) son reconocidos mundialmente por sus excentricidades, mostrar sus vidas a través de redes sociales o continuamente dar su opinión respecto a los más variados temas, Cook es una persona reservada.
Aunque en las últimas semanas ha alzado su voz ante temas como la guerra comercial, el alza de tarifas o las políticas migratorias impulsadas por el gobierno de Donald Trump, el foco de Cook está dentro de Apple y no en la esfera pública.
A pesar que el ejecutivo ha permanecido en el ojo de los medios durante toda su presidencia, ha mantenido su vida fuera de las pantallas y los diarios, con una única excepción, cuando en 2014 utilizó las páginas de Bloomberg Businessweek para hablar abiertamente de su homosexualidad. Poniendo este episodio de lado, poco se sabe de la rutina del ejecutivo, quien se define como una persona solitaria, pero fiel a sus amigos, característica que le habría hecho ofrecerle a Jobs donarle una parte de su hígado para que pudiese superar el cáncer que finalmente lo llevó a la muerte en 2011.