El Grupo Punto, propietario de las agencias de publicidad Ogilvy, From, Kipus y Fan, lanzó una nueva empresa especializada en tecnología, a la que llamó DOTT.

La nueva unidad de negocio, que incursionará en el desarrollo de software, y que primero fue presentada a nivel interno y luego se dio a conocer entre los clientes de Punto, ya salió al mercado oficialmente.

Las soluciones tecnológicas que genere DOTT serán para las campañas del grupo y también para clientes por fuera de las mismas, precisó Pablo Marqués, presidente del conglomerado, quien destacó que esta «es una marca más» dentro de Punto.

Matías Galli estará a cargo de la dirección operativa de DOTT, mientras que Marqués, junto a Lana Collares, responsable del área digital del grupo, supervisarán el proyecto.

Marqués comentó a El Empresario que esta nueva unidad llega para sumarle valor a la propuesta de Punto y que cambia la jugada. Mientras en el mundo existe una tendencia a que empresas tecnológicas compren agencias de ideas (como pasó con Globant que adquirió GUT en Argentina), «nosotros lo hacemos al revés», comentó, porque ahora «los bordes de la tecnología y la creatividad no están tan definidos, se mezclan».

Explicó que hoy no sólo se busca generar publicidad a nivel digital; grandes marcas que nacieron con naturaleza tecnológica buscan también tener presencia en medios offline y eso habla de la necesidad de tener una visión integral. Con foco en esa integralidad se lanza esta nueva empresa que incorpora tecnología para que «las marcas puedan desarrollarse al máximo», aseguró Marqués. Galli coincidió y agregó: «hacemos tecnología en el idioma de cada empresa para impulsar el futuro de su negocio».

La premisa de DOTT es mejorar cada propuesta con innovación y creatividad, y para eso cuenta con un equipo de programadores y desarrolladores que trabajarán para crear «soluciones rápidas y más personalizadas».

Algo común a todas las firmas del grupo empresarial es la visión integral con la que trabajan al momento de producir ideas y proyectos. Esa visión llevó al nacimiento de DOTT, porque el diálogo entre creativos, especialistas de medios y expertos en tecnología permite generar mejores ideas, tener más intercambio, ser más eficientes, más rápidos, eliminar obstáculos, y crear «una velocidad y una integralidad distinta», subrayó Marqués.

Foto: Leonardo Mainé

En el marco de esta filosofía con la que trabaja Punto, la creación de ideas se da tras la definición de una estrategia, y el resultado puede ver la luz en diferentes formatos y plataformas. Esos formatos generan oportunidades a nivel de creación digital. Según destacó el empresario, el equipo, con perfiles tecnológicos y con visión de comunicación, no sólo potencia la generación de ideas y proyectos, sino que permite una buena atención de la demanda de los clientes.

Collares indicó que el grupo se encarga de «convertir ideas en soluciones que den que hablar».

Camino tecnológico

DOTT trabajará inicialmente para el mercado uruguayo, con un equipo de 10 personas que creará sitios web, implementará herramientas de CRM (siglas de gestión de relación con clientes) y business intelligence y desarrollará apps, entre otros servicios.

La nueva empresa surgió «naturalmente», dijo Marqués. Con su experiencia en materia de comunicación y tecnología, el grupo empresarial ha desarrollado propuestas como Spotlike, una plataforma de marketplace para influencers, o Alan, un motor basado en inteligencia artificial (IA) que fue adquirido por la plataforma de repartos online Delivery Hero. Y también ha innovado con campañas en las que hacen hablar a un auto o que culminan con la creación de un CRM donde se monitorean las ventas de una empresa.

Las soluciones basadas en tecnologías se han implementado en clientes de diversos sectores, desde el retail hasta el financiero. Esas iniciativas han sido apuestas al desarrollo tecnológico, lo que marca un antecedente de este nuevo emprendimiento, destacó el presidente de Grupo Punto.

«Siempre incorporamos gente que viniera del lado de la tecnología y con una visión en comunicación. Eso nos permitió rápidamente adaptarnos a este nuevo mundo y entender los nuevos códigos. Preguntándonos cosas como: ¿podemos usar la tecnología?, ¿por qué no?, ¿qué nos puede dar? Así desafiamos un poco lo establecido y abrimos nuevas fronteras», valoró.