Por Brook Barnes
The New York Times

Las salas de cine han tenido problemas para recuperarse de la pandemia, en parte, porque la audiencia familiar que alguna vez fue confiable se ha desviado. El año pasado, las películas orientadas a la familia, en su mayoría de animación, representaron el 17% de las ventas de tíquets en todo el mundo, cerca de la mitad de lo que fueron en 2019.

Sin embargo, durante el fin de semana de estreno -del viernes 7 al domingo 9-, Super Mario Bros: la película (Universal Pictures) dejó a las familias boquiabiertas, generando US$ 146,4 millones en ventas de boletos en los cines de EE.UU. y Canadá, para un total de US$ 204,6 millones desde su debut el miércoles 5. Tras este último el fin de semana, la cinta superó los US$ 670 millones en todo el mundo. La producción costó a Illumination Entertainment y Nintendo unos US$ 100 millones.

La cinta lleva recaudados unos US$ 330 millones en el exterior, una cifra que la empareja con las megafranquicias de Universal como Rápidos y Furiosos y Jurassic World.

¿Han regresado las películas familiares, hasta el punto de que Hollywood puede volver a contar con ellas como apuestas seguras?

Para los ejecutivos de los estudios y los dueños de las salas de cine, la respuesta es: «¡Sí!».

«Es extraordinario. Los números siguieron creciendo a medida que avanzaba el fin de semana», afirmó Jim Orr, presidente de distribución cinematográfica nacional de Universal.

Los analistas de taquilla fueron más cautelosos. Como proveedor dominante de entretenimiento familiar, Walt Disney Studios necesita ofrecer un éxito animado antes de que se pueda llamar a una verdadera recuperación, opinó el consultor de cine David Gross. Los últimos cinco filmes animados que Disney estrenó en los cines decepcionaron en la venta de entradas: Un mundo extraño y Lightyear el año pasado, y Encanto, Raya y el último dragón y Ron da error en 2021, un año impactado por la pandemia.

«Aún hay algunos signos de interrogación en torno a las películas familiares», analizó Gross. Disney tiene dos estrenos animados próximamente en sus planes: Elemental, ambientada en un mundo donde los residentes están hechos de fuego, agua, tierra y aire, llega en junio; Wish, un musical sobre una niña y una estrella que cae del cielo, se estrenará en noviembre.

Llevar a los niños al cine puede ser costoso: tanto como US$ 110 para una familia de cuatro integrantes en Nueva York. Las familias también se acostumbraron a ver estrenos animados en casa durante la pandemia.

Entre ciertos grupos demográficos, la película de los hermanos Mario se sintió como un evento cultural. Esto no fue accidental: los especialistas en marketing de Universal bombardearon eventos deportivos televisados-March Madness, juegos de la NFL, el All-Star Game de la NBA, el Super Bowl- con promociones.

Los parques temáticos de Universal en todo el mundo ayudaron a avivar el fuego. Universal Studios Hollywood inauguró recientemente Super Nintendo World, una expansión temática que presenta a los hermanos Mario. La atracción es un gran éxito, con entradas anticipadas agotadas todos los días desde que abrió el 17 de febrero.

Orr sostuvo que Super Mario Bros: la película, que se proyectó en 3.343 cines en EE.UU. y Canadá, se benefició de la nostalgia. Nintendo presentó por primera vez sus juegos de Super Mario en los años 80. Cerca del 26% de la audiencia del fin de semana de estreno era mayor de 35 años.

«Illumination y Nintendo colaboraron para hacer una película que a los fanáticos les encanta», destacó Orr. «La gente quería salir y entretenerse con estos personajes que conocen desde hace décadas».

De fallidas adaptaciones a varios éxitos recientes

Super Mario Bros: la película recibió críticas de la prensa especializada entre mixtas y negativas en su mayoría. Pese a ello, su éxito instantáneo entre los compradores de entradas de cine, se suma a una tendencia reciente en Hollywood: los estudios, en busca de propiedad intelectual establecida y atractiva a nivel mundial, parecen haber finalmente descifrado el código sobre la adaptación de videojuegos a la gran pantalla.

La problemática historia de la industria del cine con el género del gaming comenzó hace 30 años, cuando la primera película basada en un videojuego, Super Mario Bros. (en este caso interpretada con actores), se convirtió en un sonoro fracaso.

En los últimos años, los estudios se han enamorado nuevamente de las adaptaciones de videojuegos, lo que ha llevado a éxitos como Sonic, la película (Paramount) y Pokémon: Detective Pikachu (Warner). En televisión, The Last of Us (HBO) y The Witcher (Netflix) son series populares basadas en juegos.