Por José María San Segundo, CEO de Merco
Merco mide para reivindicar las buenas acciones de las empresas de Uruguay, donde estamos encantados de presentar la primera edición de nuestro monitor: Merco Responsabilidad ESG.
Reconocer la responsabilidad es el principio de ponerla en valor y trasladar a la sociedad que las compañías han de ser responsables. Sin embargo, lo que arroja el monitor es que el 19% de las empresas del top 100 reprueban para los expertos en responsabilidad social corporativa (RSC) respecto a sus actuaciones relativas a su compromiso medioambiental, con los clientes y la sociedad, y con la ética en la gobernanza. Otro 19% sólo aprueba, mientras que un 51% obtiene una puntuación alrededor de 6 y sólo un 10% algo más de 7, dejando ver que queda mucho camino por recorrer. Necesitamos más empresas notables y sobresalientes.
Para los directivos del país, según datos de la cuarta edición de Merco Empresas y Líderes, siguen existiendo problemas con la ética y la RSC, al igual que con la apuesta por la innovación y la dimensión internacional de la empresa, que empeoran respecto a los datos prepandemia.
En el lado opuesto encontramos los resultados económico-financieros, que logran una mejor valoración junto a la calidad de la oferta comercial. Pero ello no es suficiente, porque las empresas o serán responsables o no serán.
Y es que considerando su trascendental papel como agente social, aquellas que quieran tener una buena reputación, están abocadas a ser éticas y responsables. No cabe otra opción.
Los resultados económico-financieros logran una mejor valoración junto a la calidad de la oferta comercial. Pero ello no es suficiente, porque las empresas o serán responsables o no serán.
También están llamados a ello sus líderes, cuyo perfil reputacional en 2022 refleja como principales debilidades su proyección internacional y lo relativo a su papel de impulsores de comportamientos éticos y de RSC. En contraposición, los líderes siguen destacando por su visión estratégica y cumplimiento de metas, visión comercial y su capacidad de atraer talento.
Estos retos los deben afrontar las empresas y sus directivos, que son los encargados de hacer tangibles las apuestas estratégicas de las compañías que capitanean. La función del líder es generar ese círculo virtuoso entre su reputación y la de la empresa, provocando un incuestionable efecto multiplicador.
Merco es un ranking, pero también es una metodología de gestión y compromiso ético. Nuestra misión es ayudar a las empresas de Uruguay a ser mejores para crear así un país mejor.