El CEO de Mercado Libre evaluó el ingreso de la firma al Nasdaq 100 y su apuesta al rubro financiero

Se caracteriza por su bajo perfil y suele cuidar cada una de sus palabras. Por eso, cuando habla, hay que tomarlo muy en cuenta. «Vamos a democratizar el dinero», disparó Marcos Galperin, fundador y CEO de Mercado Libre, confirmando el próximo gran objetivo de la firma, que ya había dado los primeros pasos en ese sentido con la creación de Mercado Pago y, desde mayo último, con Mercado Crédito.

«Logramos democratizar el comercio y lo vamos a seguir haciendo. También vamos a democratizar el dinero. Más de la mitad de la gente en Argentina no está bancarizada, porque el dinero está atrapado en un sistema muy caro y muy ineficiente. Vamos a liberarles el dinero a los no bancarizados», amplió en una entrevista durante el encuentro Experiencia Endeavor 2017, realizado el martes pasado en Buenos Aires.

Mercado Libre tuvo ventas netas por US$ 844 millones en 2016, es uno de los 50 sitios más visitados del mundo y alcanzó una valuación de US$ 12.400 millones. Además, por estos días vive un momento histórico: desde el lunes próximo integrará el Nasdaq 100, el índice bursátil estadounidense que agrupa a las compañías más relevantes del sector tecnológico, en reemplazo nada menos que de Yahoo, la compañía que fue sinónimo de Internet. «Yahoo era Google más Facebook juntas. Y por esa creación destructiva propia del capitalismo hoy se va y entra Mercado Libre, que antes no existía», explicó. Pero enseguida agregó: «También es una advertencia, porque no querés ser el próximo Yahoo. Si dejás de innovar te sacan del ring».

Por supuesto, la parte de marketplace es el corazón de la compañía y crece más rápido que nunca, explicó Galperin, quien recordó que la empresa comenzó como un sitio de subastas (todavía se hacen, pero es el 1% del negocio), para luego pasar a un sistema de precios fijos e incluir pymes y grandes empresas.

En 18 años de vida, la firma creó una red de 29 millones de compradores y 8 millones de vendedores. «El crédito es un lubricante muy grande al comercio y más de la mitad de los vendedores no tiene financiamiento y lo necesita», se explayó sobre el último paso de la empresa, que ya entregó más de 5.000 préstamos a una tasa promedio del 40%. Usa fondos propios y no toma depósitos para luego prestar, pero sí tiene en sus planes securitizarlos.

Galperin no escapó a la coyuntura. El debate que se desató sobre la «industria del juicio» en el mundo laboral en Argentina también toca a las pymes y a los emprendedores. «En legislación laboral tenemos mucho por mejorar. La ley de emprendedores ayuda. Nosotros, por ejemplo, tenemos 700 empleados en un país vecino por una especie de extorsión sindical y no hubo consecuencias de eso, nadie pagó un costo por eso, es dramático. Están desconectados los intereses de muchos líderes sindicales de los de los trabajadores», dijo.

También hizo referencia a la visión negativa que muchas veces la sociedad tiene del empresario en contraposición al emprendedor. «Hay confusión. Hay empresarios tradicionales espectaculares que crearon empresas enormes, toman riesgo, no hacen negocios con el Estado y son un ejemplo», comenzó con la explicación. «Pero la palabra empresario se asocia a negocios con el Estado, poco transparentes y que capturan valor de la sociedad, pero no lo aportan», avanzó. En cambio, el emprendedor está «donde hay capitalismo, donde hay movimiento, donde hay ganadores y perdedores».

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