Por The New York Times

YONHAP/EFE

Reed Hastings, uno de los fundadores de Netflix, ha dirigido la empresa desde antes de que fuera un servicio de streaming, cuando su modelo de negocio giraba en torno al envío de DVD por correo.

Ahora, tras dedicar un cuarto de siglo a convertir a Netflix en la primera gran empresa de transmisión en línea del mundo, y arrastrar al resto de la industria de los medios con él, Hastings dijo el jueves 19 que cedía su título de co-CEO y se convertía en el presidente ejecutivo de la compañía.

En su lugar, Netflix nombró a Greg Peters, director de productos y director de operaciones de la empresa, para unirse a Ted Sarandos como co-CEO. Sarandos está en ese cargo desde 2020.

Hastings, de 62 años, dijo que la reorganización ejecutiva era parte de un plan de sucesión que lleva mucho tiempo en proceso. Al anunciar el movimiento, señaló a Bill Gates yJeff Bezos como otros fundadores de compañías que pasaron a ocupar puestos de presidente «después de pasar la posta a otros».

«En los últimos dos años y medio, les he delegado cada vez más la gestión de Netflix», indicó Hastings en un comunicado, señalando que Sarandos y Peters han enfrentado los desafíos de la pandemia y los cambios en la industria del streaming. Agregó: «La junta y yo creemos que es el momento adecuado para completar mi sucesión».

Sobre su futuro, Hastings explicó que ayudará a Peters y Sarandos «y, como cualquier buen presidente, seré un puente entre la junta directiva y los co-CEO. También pasaré más tiempo en la filantropía y me mantendré muy enfocado en que las acciones de Netflix funcionen bien".

Como cualquier buen presidente, seré un puente entre la junta directiva y los co-CEO. También pasaré más tiempo en la filantropía y me mantendré muy enfocado en que las acciones de Netflix funcionen bien

Reed Hastings

Más tarde, en una entrevista en video para inversionistas, Hastings detalló que la junta directiva de Netflix había comenzado a pensar en el proceso de sucesión hace casi una década.

La compañía también nombró a Bela Bajaria, su director global de televisión, como director de contenido y designó a Scott Stuber, su director global de cine, como presidente de Netflix Film, un nuevo cargo.

Lucy Nicholson/REUTERS

Las noticias sobre Hastings acompañaron el anuncio de ganancias del cuarto trimestre de Netflix. La compañía dijo que había agregado 7,7 millones de suscriptores, muy por encima de su pronóstico de 4,5 millones, lo que atribuye la afluencia de nuevos usuarios a la sólida programación del cuarto trimestre.

Netflix generó cerca de US$ 7.850 millones en ingresos en el cuarto trimestre, un aumento de casi el 2% con respecto al año anterior. En el mismo lapso, la compañía generó cerca de US$ 55 millones en ganancias, lo que significó una caída del 90%.

Tras los anuncios, el precio de las acciones de la plataforma subió más del 6% en las operaciones posteriores al cierre.

En una carta a los accionistas, Netflix sostuvo que su plan con publicidad resultó en un aumento de suscriptores y una mayor participación de los clientes. Agregó que relativamente pocos usuarios se habían cambiado de otros planes y que los suscriptores y anunciantes se habían mostrado optimistas con la opción.

Netflix no brindó ninguna guía para la incorporación de suscriptores en el primer trimestre de 2023, luego de anunciar el año pasado que dejaría de dar esas actualizaciones a los inversores. A medida que el negocio del streaming de Netflix ha madurado, los inversores y analistas se han centrado más en el crecimiento de los ingresos y las ganancias. Pero la compañía informó que esperaba que la facturación aumentara un 4% en el trimestre, con un mayor crecimiento de suscriptores en el segundo trimestre de este año en comparación con el primero.

Foto: Archivo

Netflix, que es famoso por citar el sueño como uno de sus mayores competidores, admitió en su carta que se disputa el mercado con otras plataformas de streaming y redes emergentes como TikTok, la televisión tradicional, YouTube y los videojuegos.

El nivel de publicidad de Netflix, con un precio de US$ 6,99 por mes en EE.UU., fue un cambio importante para la compañía, cuyos ejecutivos, el principal de ellos Hastings, habían insistido durante mucho tiempo en que no creían que los anuncios fueran adecuados para su negocio. Pero el plan, que debutó en noviembre, ha sido popular entre los inversionistas que estaban asustados por las pérdidas anteriores de suscriptores de la compañía.

Netflix, que alguna vez no tuvo rival en la transmisión de video, se ha enfrentado a una mayor competencia de jugadores con mucho dinero como Disney, Comcast y Warner Bros., Discovery, compañías en las que solía confiar para la programación.

Esa rivalidad, combinada con un mercado estadounidense cada vez más saturado, ha alentado a Netflix a buscar suscriptores en el exterior, tomar medidas enérgicas contra el intercambio de contraseñas e introducir publicidad.

En su carta a los accionistas, la plataforma aseguró que esperaba aumentar sus suscriptores a través de nuevas iniciativas como «compartir de pago», que permite a los clientes sumar usuarios a las cuentas por una tarifa adicional.

Una cartelera con menos estrenos y algunos éxitos

Netflix anunció que su lista de películas para 2023 tendrá 49 largometrajes, incluidas algunas animaciones y estrenos en idiomas extranjeros. Eso es menos que el año pasado, cuando las ambiciones de la compañía de lanzar un filme a la semana resultaron en 61 títulos con actores en inglés, cinco animadas, tres anime, y 17 películas en otros idiomas.

Los aspectos más destacados para 2023 incluyen un thriller de David Fincher, The Killer, protagonizado por Michael Fassbender; la epopeya de ciencia ficción deZack Snyder Rebel Moon; y Pain Hustlers de David Yates, encabezada por Emily Blunt, que la compañía compró en el Festival de Cine de Cannes el año pasado por US$ 50 millones. Netflix también está cumpliendo su intención de franquiciar su contenido con las segundas iteraciones de Misterio a bordo y Misión de rescate, que debutarán este año.

Mientras, Netflix destacó su éxito con producciones recientes como la serie Merlinay Glass Onion: Un misterio de Knives Out, una película que se proyectó en un número limitado de cines en EE.UU. antes de su debut en la plataforma.

Hastings, que ya había fundado con éxito la empresa llamada Pure Software, ayudó a crear Netflix en 1997 con Marc Randolph como un servicio de alquiler de películas por correo. Ambos establecieron una cultura corporativa de «honestidad radical» hasta tal punto que en 1998, Hastings hizo una presentación a Randolph detallando las razones por las que creía que ya no estaba en condiciones de seguir siendo CEO.

Desde entonces, Hastings ha sido vital en el cambio de la empresa al streaming. Aunque el fundador solía repetir la frase: «Nada de publicidad en Netflix. Punto», finalmente eso sucedió.

La única marca negra real en el historial de Hastings fue Qwikster, la porción de DVD de corta duración del negocio que Netflix creó para diferenciarlo de la oferta de streaming. El proyecto duró solo un mes luego de que 1 millón de clientes se dieran de baja, descontentos con el aumento de precio que se produjo al dividir el servicio en dos partes.