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Que todos confiaron el desarrollo de sus activos digitales y NFT(tokens no fungibles) para el nuevo mundo virtual metaverso a la novel empresa estadounidense InfiniteWorld, que este año podría alcanzar una valuación superior a los US$ 700 millones.

Detrás de esta compañía está el uruguayo Yonathan Lapchik, con amplia experiencia en áreas como blockchain (ver recuadro) y actual CEO y cofundador de la empresa.

Según explicó Lapchik a El Empresario, InfiniteWorld fue creada hace un año dentro del ecosistema de la empresa SUKU, firma especializada en blockchain, para focalizarse en crear infraestructura «que ayude a las marcas a ingresar en el mundo virtual o en el metaverso. Para ello hicimos una fusión con una empresa denominada DreamView, fundada en 2016 por los mismos visionarios y pioneros en las tecnologías de imágenes generadas por computadora (CGI) en Lucasfilm y Disney. Nosotros invertimos en ellos hace tres años», dijo.

Yonathan Lapchik. CEO InfiniteWorld

Una vez que se selle el acuerdo final, InfiniteWorld pasará a cotizar en Nasdaq con el símbolo «JPG», y ejecutará la inversión de los US$ 143 millones.

Su trabajo captó la atención de Aries I Acquisition Corp., una empresa de adquisición de propósito especial (SPAC) —conocida también como compañía de «cheques en blanco»—, cuyo propósito comercial específico y modelo de negocio se centra en participar en una fusión o adquisición de otra firma. Aries reunió US$ 143 millones, luego salió a cotizar en Nasdaq y eligió a InfiniteWorld para fusionarse «entre otras 100 compañías de varios rubros, entre ellos blockchain y crypto», destacó Lapchik.

Tras la firma de un preacuerdo, la empresa combinada tendrá un valor de capital de unos US$ 700 millones. Una vez que se selle el acuerdo final, InfiniteWorld pasará a cotizar en Nasdaq con el símbolo «JPG», y ejecutará la inversión de los US$ 143 millones, agregó.

El monto se destinará para aumentar el negocio de aquí a tres años. Para ello, la estrategia será aumentar el equipo, asociarse con más marcas y seguir construyendo comunidad.

La empresa, radicada en Miami, está compuesta por 130 personas, la mayoría en EE.UU., pero también cuenta con profesionales en Europa, Argentina y unos 10 en Uruguay. Según Lapchik, uno de los objetivos será incrementar el equipo en Uruguay. «Apostamos por el país tanto por la ventaja de la diferencia horaria, como por la calidad profesional y cultural. Hay muy buenos expertos que pueden sumar a la empresa», dijo.

El acuerdo está programado para cerrarse en la primera mitad de este año.

«La generación Z le dedica mucho tiempo al mundo virtual y valora mucho más las experiencias allí que las del mundo físico, y eso va a crecer exponencialmente. La realidad física y la virtual estarán mezcladas», dijo el CEO al justificar la creación de la nueva compañía.

Lapchik explicó que la empresa trabaja con cuatro tecnologías. Primero, en la creación de contenidos virtuales con una plataforma escalable y automatizada. Luego, un NFT chip que se coloca en el producto y genera un NFT que lo representa. «Por ejemplo, si alguien quiere comprar la remera de (Luis) Suárez cuando hizo el penal en Sudáfrica, se genera un link no corruptible entre la remera y el NFT y de esa forma se verifica que es la verdadera en forma criptográfica», explicó. Otra es NFT store, para que las marcas puedan crear sus tiendas dentro de sus sitios de e-commerce. Incluye sistema de pagos en criptomonedas, tecnología para conocer los clientes, entre otros. La última es NFT por texto. Se trata de distribución de NFT por SMS.

La empresa también ofrece «mundos de metaverso» para que marcas repliquen el mundo físico en el virtual y vendan sus productos, cerró Lapchik.

YONATHAN LAPCHIK. CEO INFINITEWORLD

Una década en blockchain

En 2012, Yonathan Lapchik hizo un MBA en la Universidad de Duke (EE.UU.) donde conoció el bitcoin. Su pasión por esta tecnología lo llevó a Deloitte en 2014, donde lideró la creación del primer laboratorio de blockchain del mundo. En tres años pasó de tres personas a 1.400. A fines de 2017 dejó la firma y al asesorar un último cliente con una solución de trazabilidad con blockchain se enamoró de ese proyecto. En 2018, junto a siete exDeloitte crearon SUKU, empresa que ayuda a marcas a ser transparentes y garantizar autenticidad con blockchain.