Por Antonio Larronda

Emprender después de los 50 años es un gran desafío. Y si a eso se le agrega una mudanza a otro país, la dificultad se multiplica.

Tras ese gran reto llegó en 2020 a Uruguay el argentino Gustavo Avakian, quien se mudó al país para crear, junto al empresario uruguayo Hugo Benedetti, CEO deIBF Negocios, Garbatella, una fábrica de pastas que se pretende desarrollar como cadena en los próximos cinco años.

Para este proyecto, los empresarios estiman desembolsar una inversión total que rondará los US$ 600.000 en ese período. «Será para crear unos cinco locales», adelantó Avakian.

El primero de ellos ya abrió en diciembre del año pasado en el barrio Punta Carretas. Para esa apertura los socios del proyecto desembolsaron US$ 250.000 entre maquinaria, local, preparación de personal y armado de la marca.

Leonardo Maine/Archivo El Pais

Según el empresario argentino, el objetivo ahora está puesto en consolidar este primer espacio para luego comenzar con la expansión. «Queremos consolidar el equipo, la planta y el local. Además, conocer el público y sus preferencias para luego transitar un camino de concretar una cadena», añadió.

Según Avakian, proyectan abrir un local por año para llegar a 2026 con cinco puntos de venta, cuatro en Montevideo y Canelones y uno más en Punta del Este.

Para Montevideo y zona metropolitana, además de Punta Carretas, las zonas elegidas hasta el momento son Pocitos, el área de los barrios privados de La Tahona en Canelones y otro «a analizar según se comporte la marca» entre Malvín y Carrasco.

La inversión con cada uno de esos locales estará entre US$ 90.000 y US$ 100.000 mientras que los productos se elaborarán desde la planta que construyeron en el primer espacio de la marca.

Leonardo Maine/Archivo El Pais

Avakian destacó que para garantizar la calidad de sus productos decidieron apoyarse en dos pilares: un experto «pastero» en fabricación de pastas con más de 30 años de experiencia en el mercado y materias primas de primer nivel de proveedores locales.

Desde su inauguración, en diciembre, el crecimiento del negocio mes a mes ha sido incremental cercano a un 300%. Esto es tanto en pastas frescas como congeladas, consignó el empresario quien detalló que sus productos estrellas son los sorrentinos y raviolones que representan cerca del 70% de la venta de Garbatella.

Esta buena respuesta del mercado le permite pensar en ampliar su portafolio de negocios. El plan, reveló Avakian, es expandirse a otros canales de venta como hoteles y restaurantes. «Lo vamos a desarrollar en el segundo semestre de este año cuando también sumemos delivery y pasta pronta», comentó.

Leonardo Maine/Archivo El Pais

La primera casa de la marca está ubicada en la esquina de Ellauri y Montero, tiene 75 metros cuadrados (m2) y hasta el momento ofrecen 22 productos de pastas, además de cinco tipo de salsas (fileto, rosa, caruso, bolognesa y clásica).

Además, para marcar un diferencial con otras propuestas del mercado, la empresa está desarrollando nuevos productos. «Vamos a lanzar propuestas que irán por el lado vegano y otros que se centrarán en productos del mar y otras carnes. Esto será en el correr de dos o tres meses», dijo Avakian.

Asimismo, complementan su menú gastronómico con productos de delicatessen (locales e importados), entradas y picadas, además de exclusivos vinos argentinos de Mendoza y Salta. Y si bien aclaró que el objetivo no es transformar el local en una vinoteca, están evaluando a futuro sumar marcas uruguayas.

Por último, y como corolario del menú, en Garbatella también se podrán elegir varias opciones dulces. Para esta primera etapa, las opciones pasan por chocolates importados y diferentes postres uruguayos, concluyó el empresario.