Todos los 27 de enero se celebra el Día de la extracción de leche materna para reconocer el tiempo, esfuerzo y dedicación que requiere el proceso de extracción de leche materna a las madres.
También el objetivo de este día es la promoción de la extracción de leche materna, porque la OMS y el UNICEF la recomiendan como el alimento ideal para los bebés y niños pequeños. Estos organismos aconsejan que los bebés inicien la lactancia materna en la primera hora del nacimiento y sean amamantados exclusivamente durante los primeros 6 meses de vida, lo cual significa que no se les proporcionan otros alimentos ni líquidos, ni siquiera agua. A partir de los 6 meses de edad, los niños deben comenzar a comer alimentos complementarios seguros y adecuados mientras continúan amamantando hasta los 2 años o más.
Pero en muchas situaciones la mamá no puede darle la leche al bebé del pecho directo, por ejemplo en el caso de los bebés prematuros o cuando la mamá tiene que salir a trabajar o dejar al bebé al cuidado de otra persona. Para estos casos y otros es muy importante conocer las recomendaciones de extracción y manipulación de leche materna.
Además la extracción de leche materna tiene varios beneficios, por ejemplo: ayuda a aumentar la cantidad de producción de leche, cuando el bebé tiene bajo peso o tiene algún problema que hace que no tenga suficiente fuerza o sea demasiado pequeño para succionar directo del pecho (bebés prematuros).
Hay mamás que quieren descansar toda la noche y se sacan leche para que sea el papá el que alimente al bebé en algunas ocasiones. Algunas madres hacen donaciones voluntarias de leche materna, para alimentar a otros bebés que lo necesitan. Algunas madres tienen hiperproducción de una mama o en las dos y para evitar una mastitis o para no llegar sufrir una mastitis severa es necesario extraer el excedente de leche.
Como sé que la lactancia y mantener la producción de leche y que el bebé logre un buen acople y demás es todo parte de un proceso complejo que nos puede abrumar mucho, le pedí a Florencia Burghi, asesora en lactancia materna y Psicomotricista, creadora de Anidando.uy, que me diera algunas recomendaciones para compartirlas con ustedes.
Recomendaciones para la lactancia materna
Tanto si tenés una lactancia materna exclusiva o mixta (complementada con fórmula de leche para lactantes), es fundamental que sepas que la lactancia necesita ser a demanda.
A demanda de tu bebé, o sea, cada vez que muestra una señal de hambre o interés en prenderse al pecho. No es recomendable establecer horarios para las tomas y en ningún caso ofrecemos 15 minutos de cada mama o “10 y 10” como muchas veces se promulga. Cada bebe va generando su ritmo de succión al igual que cada mujer tiene sus tiempos de producción y salida de la leche, nada nos asegura que en 10 o 15 minutos nuestros bebés ya se alimentaron lo suficiente. Es verdad que una hora en la teta en ocasiones tampoco es lo que está “dentro de lo esperado” y en estos casos es fundamental poder observar diferentes aspectos: como la succión, la postura, las señales de saciedad, el sueño, entre otros.
Aunque en ocasiones este sistema con tiempos podría llegar a ser práctico, en el correr de las semanas termina atentando contra nuestro cuerpo y nuestra producción de leche, alejándonos cada vez más de una lactancia exclusiva o una lactancia mixta organizada. Existen períodos como por ejemplo el verano, que tanto el calor como los cambios en las rutinas, la mayor cantidad de visitas generan una mayor demanda de la teta. En el primer caso por necesidades físicas como la sed, en el segundo caso porque la teta es su lugar seguro, su lugar de calma, su refugio. Por eso no podemos establecer horarios ni duración para las tomas, porque a veces necesitan que sean más seguidas o más largas y con el tiempo incluso las hacen más cortas y efectivas, depende la edad y el desarrollo, así como el momento que están pasando. Saber que somos su lugar seguro, nos da mayor calma cuando los días se vuelven agotadores.
Sobre la extracción de leche materna
Mucho se habla de la extracción y han generado miedos e inseguridades en torno a esto. En primera instancia siempre es importante que sepas que durante las primeras semanas de vida del bebé podemos tener mayor producción de leche, aprovechar este caudal es una gran herramienta para comenzar a guardar leche, siempre y cuando tu y tu bebe no tengan otras necesidades como por ejemplo aumento de peso. Si no están transitando una dificultad, utilizar el extractor o un recolector de leche materna puede ser de gran ayuda para comenzar a hacer tu banco de leche para cuando lo necesiten.
Para que las extracciones sean eficientes tienen que ser planificadas y organizadas, no recomiendo la extracción enérgica, ni extraerse a todas horas.
Soy fiel a siempre apelar a la observación. Para esto podés preguntarte: ¿cuándo mi bebé está más tranquilo y yo puede dedicar un tiempo a esto?, ¿cuándo descansa mejor?, ¿cómo estoy yo?, ordeñarte horas tras horas con una gran cuota de cansancio no te llevará a un aumento de producción de leche.
Observar y anotar cómo son las tomas de tu bebé puede ser de gran ayuda porque te va a guiar al momento de realizar extracciones, buscando los momentos más oportunos. En algunas ocasiones, la demanda es alta y encontrar momentos tranquilos para ordeñarte es toda una odisea. En estos casos podés generar en alguna toma del día un ordeñe en simultáneo a la toma de tu bebé, ya sea a través de un colector o de una ordeñadora.
De este ejemplo surge el mito de si al ordeñarte le estás quitando leche a tu bebé. Tenés que decirte que esta afirmación no es real, la leche se produce también por la estimulación que hace la succión. Pero si esto te inquieta, podés esperar entre 30 y 40 minutos post toma.
Otra recomendación importante es evitar realizar extracciones cuando se dan períodos de mayor demanda. Por ejemplo, si sabés que de 18 a 20 horas tu bebé toma con mayor frecuencia, no realices extracciones en este horario.
Para la conservación de la leche, recomiendo el cuidado de las temperaturas, sin mezclar leche de diferentes temperaturas. Asimismo, si ya sabés que una cantidad de leche va a ser congelada, priorizá hacerlo dentro de las primeras 24hs, en recipientes de vidrio o bolsas especiales para refrigeración de leche materna. Lo importante es comprender que ordeñarte a todas horas no te ayuda, sino que termina aumentando tu carga mental y repitiendo acciones que te desgastan.
Es un proceso complejo la producción de leche y para poder sostener esto que sabemos que es el mejor alimento para tu bebé, necesitás una red de contención. Necesitan ser contenidos por profesionales y también a nivel familiar. Por eso siempre les recomiendo principalmente que consulten con asesoras de lactancia si tienen dificultades en la lactancia o dudas en la extracción y manipulación de leche materna.
Natalia Villanueva
Nati, mamá de Martina y Salvador, creadora de Puérpera mía, donde ayudo a las mamás a prepararse para su post parto. Gestora de la guía para la maternidad, una comunidad de emprendimientos y profesionales que acompañan a las mamás y a las familias en Uruguay.
Podés seguirla a través de las cuentas de Instagram @puerpera_mia y @guiamaternidad.uy