Salud

En esta columna, teniendo en cuenta que volvieron los días soleados y cálidos, vamos a recordar las medidas de prevención para loscuidados del sol.

No hay duda de que el sol tiene efectos positivos sobre la síntesis de vitamina D, pero además los días soleados durante todo el año nos mejoran el humor. 

Sin embargo, hay efectos negativos de los rayos solares fundamentalmente a nivel de piel y ojos que, aunque todos conocemos, es bueno reiterarlos.

En nuestro rol de pediatras tenemos la obligación de informar a los padres, cuidadores y a los propios niños cuando la edad lo permite, sobre los daños de la exposición y las medidas de foto protección cuyo objetivo es prevenir el daño que ocurre en la piel como resultado de la exposición a la radiación ultravioleta.

La mayoría de los niños y adolescentes, sobre todo en verano, pasan mucho tiempo al aire libre, disfrutando de la playa, realizando deportes. De ese modo están expuestos a los rayos solares, lo que determina que antes de cumplir 21 años habrán recibido entre 50% y 80% de la radiación solar que recibirán a lo largo de su vida. 

El daño solar sobreviene con cada exposición y se acumula a lo largo de toda la vida, favoreciendo de esa forma el desarrollo de cáncer de piel en la vida adulta. Los niños que son protegidos correctamente del sol tienen 78% menos de riesgo que aquellos que no reciben la protección adecuada.

La educación y la prevención deben abarcar todos los ámbitos que el niño y el adolescente frecuentan, recalcando una y otra vez la importancia de los cuidados.

Les hacemos llegar algunas recomendaciones, que seguro han escuchado y visto en los medios de prensa, que ayudan a prevenir el daño mencionado. Entre ellos:

* Evitar la exposición solar entre las 10 y las 17 horas.

* Usar ropa adecuada: tejidos de malla apretada o compacta (no calados), oscura y holgada.

* Si disponen de ellos, usar lentes que contengan filtro UVA y UVB.

* Usar sombreros de ala ancha que protejan cara y cuello. En caso de no contar con ellos, gorros con visera.

* Usar foto protectores tópicos. Son productos cuya composición permite que se absorban, reflejen y dispersen los rayos ultravioletas, evitando que penetren en la piel.
Se recomiendan a partir de los 6 meses de edad siendo lo ideal no exponerlos al sol, utilizar ropa ligera que cubra la mayor parte de la piel y la permanencia a la sombra. Solo se colocarán foto protectores en las zonas expuestas y en poca cantidad.

* El factor de protección solar 30 ya es suficiente para proteger al niño y debe absorber tanto las radiaciones UVA como las UVB.

* Debe aplicarse 30 minutos previos a iniciar la exposición (siempre que estén al aire libre), debe ser resistente al agua y se aconseja reaplicar luego del baño.

Sin duda, la obligación de los pediatras es recomendar a los padres y cuidadores las diferentes medidas de prevención pero finalmente la responsabilidad es de ellos.

Hasta la próxima columna…

CONOCÉ A NUESTRA COLUMNISTA

Alicia Fernández

Médica pediatra
Coordinadora Área Programática de la Niñez
Dirección General de Salud

Podés seguir a nuestra pediatra de cabecera en Twitter como@AliFernandezUY