Intimidad
Anderson es ya una reconocida activista que desde hace más de una década colabora con instituciones para reclutar a otros dispuestos a cambiar la dieta y el mundo.
Además del home office,el veganismo es la gran revolución por venir que la pandemia aceleró. En el último año miles de personas se sumaron a este movimiento que promueve un trato justo para todos los seres vivos.
El ministro de Consumo de España llamó a sus compatriotas a dejar de comer carne y derivados, un gesto inédito para un funcionario público. Pero más ruido que este caso, es el que hizo Pamela Anderson quien es ya una reconocida activista que desde hace más de una década colabora con instituciones para reclutar a otros dispuestos a cambiar la dieta y el mundo.
“El colesterol en la carne, los huevos y los lácteos provocan el endurecimiento de las arterias. Ralentiza el flujo de sangre a todos los órganos del cuerpo, no solo al corazón. Puedes mejorar tu salud en general y aumentar la resistencia en el dormitorio haciéndote vegano. Dura más, hazte vegano”, sugería la actriz en una de las últimas actividades de PETA, organización sin fines de lucro que lucha contra el maltrato animal.
Anderson es de las figuras de Hollywood que más se involucra en esta cruzada, incluso presentó varias marcas de ropa ecológica, promovió un restaurante temático en París y hasta dio charlas en la universidad de Oxford. Este 2021 agregó sustento científico a su discurso con el fin de disuadir definitivamente a los carnívoros fanáticos, asegurando que “los veganos son mejores amantes”.
Menos colesterol total
La ciencia vuelve a respaldar esas palabras en un estudio realizado en más de 166.000 adultos del Reino Unido que se presentó semanas atrás en el Congreso Europeo sobre Obesidad (ECO), y que confirma que “los vegetarianos parecen tener un perfil de biomarcadores más saludable que los consumidores de carne, y esto se aplica a los adultos de cualquier edad y peso”, dice en sus conclusiones.
Para saber si la elección de la dieta puede influir en los niveles de los marcadores de enfermedad en sangre y orina, los investigadores de la Universidad de Glasgow realizaron un estudio transversal a partir de los datos de 177.723 participantes sanos (de 37 a 73 años) del estudio UK Biobank, que no declararon ningún cambio importante en sus hábitos alimentarios durante los últimos cinco años. Los convocados fueron clasificados en dos grupos: vegetarianos (4111 individuos que no comen ningún tipo de carne, ni roja ni blanca) y carnívoros (166.516 participantes).
Luego se examinó la asociación con 19 biomarcadores sanguíneos y urinarios relacionados con la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, la salud del hígado, los huesos y las articulaciones y la función renal, pero incluso después de tener en cuenta factores potencialmente influyentes como la edad, el sexo, la educación, el origen étnico, la obesidad, el tabaquismo y el consumo de alcohol, el análisis concluyó que - en comparación con los que ingieren carnes – “los vegetarianos tenían niveles significativamente más bajos de 13 biomarcadores, entre ellos el colesterol total; colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL, el llamado ‘colesterol malo’); apolipoproteína A (vinculada a la enfermedad cardiovascular) gamma-glutamil transferasa (GGT) y alanina aminotransferasa (AST) - marcadores de la función hepática que indican inflamación o daño a las células; factor de crecimiento similar a la insulina (IGF-1; una hormona que fomenta el crecimiento y la proliferación de las células cancerosas); ácido úrico; proteína total y creatinina (marcador del empeoramiento de la función renal).
La dieta vegana: deficiencias y beneficios
La dieta vegana tiene deficiencias si no se la sabe equilibrar, por ejemplo, en el calcio y la vitamina D.
“Nuestros resultados dan que pensar” afirmaba en el artículo Carlos Celis Morales, de la Universidad de Glasgow (Reino Unido), que dirigió el trabajo. “Además de no comer carnes rojas y procesadas, que se han relacionado con enfermedades del corazón y algunos cánceres, las personas que siguen una dieta vegetariana tienden a consumir más verduras, frutas y frutos secos que contienen más nutrientes, fibra y otros compuestos potencialmente beneficiosos. Estas diferencias nutricionales pueden ayudar a explicar por qué parecen tener niveles más bajos de biomarcadores de enfermedades que pueden conducir a daños celulares y enfermedades crónicas” concluía Celis.
Durante los momentos más duros del COVID 19 diversos ensayos clínicos ahondaron en el comportamiento del virus en relación al estilo de vida, coincidiendo la mayoría en que dejar las carnes e ingerir con regularidad verduras, frutas, cereales y legumbres mejora las defensas del organismo, junto con otros factores asociados a la actividad física y a los hábitos. Es un poco lo que hace siglos intentaba decirnos la literatura erótica cuando hacia mención a los “poderes afrodisiacos” de ciertos alimentos: no se trata de comer cada tanto nueces y paltas y …voila!, sino de elegir nutrientes benéficos para la salud cardiovascular, como todos los de origen vegetal, para que a mediano plazo impacte bajo las sábanas.