Los celos del príncipe Carlos dividen a la corona y cobran protagonismo en The Crown

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El Príncipe Carlos durante su visita a Alemania. Foto: AFP

Realeza

La serie The Crown hace un retrato de la personalidad del príncipe Carlos y su conflicto con Diana. Además, otros especialistas en realeza remarcan su roce con la familia Middleton

No son pocos los expertos en la realeza británica que advierten sobre los "celos" del príncipe Carlos: en el pasado dirigidos a su primera esposa y madre de sus hijos Lady Diana, hoy se enfocan en el vínculo de su propio hijo William con la familia de Kate Middleton, que varios señalan como el factor de alejamiento entre padre e hijo.

La serie The Crown, en su última temporada, expone el quiebre entre Carlos y Diana, la "princesa del pueblo", quien habría corrido del centro de la escena al hijo de Isabel II y Felipe de Edimburgo; el príncipe que, por ahora, ve el trono de lejos.

Al mismo tiempo, varios miembros de la familia real, incluido el príncipe William según publicó el diario británico The Times, apuntaron contra la serie de Netflix y la consideraron desafortunada, simplista e imprecisa en su recreación de las relaciones entre los distintos integrantes de la corona.

En su cuarta temporada, The Crown muestra el ascenso de Diana y retrata uno de los eventos más importantes en la juventud de los príncipes de Gales: su primera gira internacional a Australia y Nueva Zelanda en 1983. Para la ficción, se trató de uno de los primeros puntos de inflexión en la pareja.

Los jóvenes Carlos y Diana -ella, con 21 años y reciente madre de William- se encontraron con un cargadísimo itinerario que cumplir en un momento de suma necesidad de la corona británica por su bajísima popularidad en esas tierras.

Pero mientras Diana gestionaba el tiempo para cuidar de su hijo primogénito con ayuda de su niñera real, también logró establecer un vínculo inesperado con la enormidad de australianos y australianas (especialmente madres jóvenes) que se acercaban a ella, intrigadas por su simpleza y humanidad. Mientras tanto, Carlos procuró quedarse en el molde de heredero serio.

En la producción de Netflix, esta circunstancia causa una discusión a los gritos que culmina, ya en Reino Unido, con los príncipes yéndose cada uno a una casa diferente desde el aeropuerto.

The Crown no es la única obra que apunta a los supuestos celos de Carlos. El libro Rebel Prince: the Power, Passion and Defiance of Prince Charles, publicado en 2018 por Tom Bower, hace análisis similares.

Algunas de las características que el libro resalta son "un sentido de superioridad", "deslealtad" y "resentimiento hacia Diana", mientras que se refiere a la obra de caridad de más de 40 años de Carlos como una manera de "mejorar su perfil y reforzar su confianza en sí mismo".

En la misma sintonía, Bower asegura que el longevo príncipe se sintió "usurpado" por los Middleton, la familia de su nuera Kate Middleton, y "apartado" de sus nietos, cuando William decidió pasar la Navidad con los padres de ella. No es la primera vez que se muestra a Carlos como una persona sensible, pero este retrato caprichoso ha sido tildado de dudoso por el periodista Bee Wilson de The Guardian.

En todo esto hay una realidad: el príncipe Carlos ya tiene 72 años y su madre, la reina Isabel, va por los 94. Nadie puede negar que el hombre se preparó mucho tiempo para suceder a su madre en el trabajo. "Cuando te casás, en mi posición, te tenés que casar con alguien que probablemente algún día se convierta en reina. Y tenés que elegir cuidadosamente a alguien que pueda cumplir con este particular rol, porque la gente espera mucho de una persona así, y tiene que ser alguien muy especial", explicaba sobre las presiones de la vida en la corte, en una entrevista anterior a su compromiso con Lady Di.

Desde entonces, ha corrido mucha agua bajo el puente (por empezar, Carlos está casado con Camilla Parker Bowles desde 2005) y solo él sabe, en su fuero más íntimo, cuál es su consideración sobre lo que le conviene a la corona británica en este momento. Probablemente, un monarca más joven.

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