REALEZA
El duque de Sussex participará de los Invictus Games en Países Bajos pero no concurrirá al homenaje por la muerte de su abuelo el príncipe Felipe
El duque de Sussex rechazó asistir a los actos conmemorativos por el aniversario de la muerte de su abuelo Felipe pero a la vez publicó un desfachatado video donde anuncia su presencia en los próximos Invictus Games que se realizarán en Países Bajos.
En 2014, el príncipe Harry inauguró los Invictus Games, una serie de competencias y juegos para los veteranos y heridos de guerra. Se trata de uno de los eventos a los que más cariño le tiene y en los que siempre se involucra al máximo. De hecho, en más de una ocasión recaudó dinero a través de eventos y de su propia organización para poder realizarlos con más medios. Los juegos se llevarán a cabo el próximo 16 de abril y el príncipe, como siempre, no tuvo problema en participar de la publicidad de los mismos.
De ahí que haya intervenido en una de sus últimas publicaciones. Se trata de una videoconferencia en la que habla con otros miembros de su equipo y en la que intenta aprender algunas frases y palabras en neerlandés. Hacia el final del video llega la sorpresa: el príncipe deja de lado toda su compostura para ponerse unos anteojos de sol naranjas, un sombrero de fiesta también naranja y quitarse su abrigo oscuro para dejar ver una camiseta naranja y hasta se levanta de su silla y muestra que también lleva unos pantalones deportivos naranjas. Todo esto para confirmar su asistencia y afirmar que se encuentra más que preparado.
La polémica, tal como repercutió en Reino Unido, es que este video tan divertido fue publicado unas horas después de que Harry haya confirmado que no estará presente en los actos conmemorativos por el príncipe Felipe, a finales de este mes, un año después de su muerte.
Los Sussex no quieren regresar al Reino Unido debido a que el gobierno ya adelantó que la policía local no los protegerá, incluso, después del ofrecimiento de Harry de pagar la seguridad de su propio bolsillo. Es por esto que la familia asegura no se sentirse segura para viajar a Londres incluso sabiendo que la reina Isabel está “desesperada” por conocer personalmente a Lilibet Diana.