El príncipe Hussein bin Abdullah, heredero del trono de Jordania, cumplió 26 años el pasado 28 de junio y es considerado uno de los solteros más codiciados del mundo. El joven no solo pertenece a la realeza y es multimillonario, entre las variables que lo ubican como un buen partido, sino que también es considerado agradable e inteligente. Y, si bien no hay un consenso generalizado al respecto, muchos lo tildan de elegante y buen mozo.

Hussein es el primero de los cuatro hijos del rey Abdullah y de Rania de Jordania, famosa por su belleza y por un estilo único. De acuerdo con la revista Forbes, su familia tiene un patrimonio neto de 750 millones de dólares.

Lejos de echarse a disfrutar de su fortuna, el príncipe se toma muy en serio su trabajo como royal. Luego de terminar el colegio en Jordania, Hussein estudió Historia Internacional en la Universidad de Georgetown, en Washington (EE.UU.), y después formó parte de la Academia Militar Sandhurst, una escuela de entrenamiento del ejército británico a la que han asistido miembros de la realeza de todo el mundo. Hoy es teniente de las Fuerzas Armadas de su país.

Sus compromisos como príncipe heredero se limitan a cuestiones ceremoniales sin conexión política. En 2015, cuando tenía 20 años, se convirtió en la persona más joven de la historia en presidir una sesión del Consejo de Naciones Unidas. Reconocido por su talento para la oratoria, en 2017 pronunció el discurso de bienvenida del Foro Económico Mundial celebrado en Jordania. En ese mismo año, también habló al público en la Asamblea General de la ONU.

Si bien ya era reconocido desde antes, la visita del príncipe William a Jordania en 2018 terminó de consagrarlo. El heredero se encargó de darle a su par británico un recorrido personal por la ciudad de Jerash. En esa oportunidad, las fotos de ambos mirando un partido del mundial de Rusia lo acercaron a la supuesta "normalidad occidental".

De todas maneras, el carisma no es solo mérito propio sino parte de la impronta de su familia, amada desde hace siglos por el pueblo. De hecho, se cree que son descendientes directos del profeta Mahoma.

Con dos millones y medio de seguidores en Instagram, Hussein muestra las distintas facetas de su vida y provoca suspiros desde todas las latitudes: reuniones y compromisos públicos, actividades benéficas, momentos de lectura, partidos de fútbol, vuelos en helicópteros y aviones, paseos en moto, cocina, paracaidismo, boxeo y prácticas de guitarra, entre otras actividades.

Creó la Crown Prince Foundation en 2015 para promover la creatividad en los jóvenes y ayudarlos a desarrollar su potencial, de manera tal que puedan alcanzar puestos profesionales líderes en Jordania. La idea es descubrir y perfeccionar sus habilidades, reforzar el deseo por la excelencia y promover el servicio a la comunidad.

Además de su amistad con el príncipe William, Hussein fue visto en 2017 en el desierto de Wadi Rum, conocido por su arena roja, acampando con algunos amigos famosos como Karlie Kloss y Ellie Goulding.