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"Huele a divorcio y arrepentimiento", el peculiar anuncio que hizo al donar su vestido de novia

Una mujer publicó en las redes sociales un singular aviso para regalar su vestido de boda; sin embargo, la aclaración que hizo fue lo que acaparó toda la atención.

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vestido de novia

El vestido de novia es no de los elementos más importantes para una mujer que está a punto de casarse. Mucho se juega a la hora de elegir el atuendo indicado para la ceremonia en la que dos personas unirán sus vidas.

Pero la realidad es que un casamiento es diferente para todas las parejas. En este contexto, un peculiar anuncio relacionado con este tema llamó la atención de los usuarios de redes sociales. Resulta que, lejos de querer ganar dinero con el look que un día la hizo feliz, una joven decidió regalar su indumentaria bajo la consigna: “huele a divorcio y arrepentimiento”.

“¿Alguien quiere o conoce alguien que le gustaría este vestido?”, así inició el singular posteo de la mujer. La originaria de Glasgow, Escocia, sorprendió a la comunidad virtual al revelar cuánto pagó por su prenda: poco más de US$3000. Su publicación, citada por el medio The Sun, se viralizó de inmediato por la cómica forma en que hizo el anuncio.

En su mensaje, la vendedora hizo una advertencia para los que estuvieran interesados en el vestido: “La felicidad no estaba incluida en la venta”, dijo de manera contundente. Por si eso no fuera demasiado, también agregó que podría “necesitar un exorcismo” por todo lo que ocurrió en su matrimonio después de que lo usó.

Aunque no se mostró alguna imagen del ahora famoso vestido de novia, la involucrada sí proporcionó algunas características básicas. Detalló que lo adquirió en la tienda Angelique Lamont, que también se ubica en Glasgow. Asimismo, de una forma muy singular, dijo cuál era la talla y que, por supuesto, se utilizó solo una vez: “Blanco virgen. Literalmente con miles de lentejuelas y gemas”, bromeó.

En ese momento, ya había captado la atención de los usuarios. No obstante, su historia causó todavía más furor después de que dijera que la persona que compre la prenda debería llevarla con un sacerdote. Según expresó, la bendición religiosa era necesaria para alejar cualquier mal augurio del vestido.

De esta manera, se sobreentendió que la separación de la pareja, tal vez, no ocurrió en los mejores términos. Por eso, en muchos de los comentarios los usuarios felicitaron a la mujer por su sentido del humor y tomarse las cosas de una manera cómica. Algunos más la calificaron como creativa al considerar que, seguramente, esta era una forma de superar su ruptura.

LA NACIÓN (GDA)

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