CELEBRIDADES

Kourtney Kardashian y Travis Barker se casaron por tercera vez. En esta oportunidad el escenario elegido fue el histórico “Castello Brown”, un edificio medieval ubicado en Portofino, Italia.

En los últimos días las noticias de la boda entre la socialité y el rapero acapararon la atención de la prensa internacional, no sólo por lo exótico que resulta la pareja en sí misma, sino porque ella forma parte de una de las familias más seguidas del entretenimiento internacional.

Gracias a las fotografías y videos que se han dado a conocer hasta el momento, sabemos que la pareja no escatimó en gastos para darse el “Sí, acepto”, frente al grupo más cercano a ellos entre los que se encuentra su familia y amigos.

Parte de los invitados especiales a la boda y que fueron testigos del enlace nupcial estuvieron las hermanas y medias hermanas de Kourney, Kim y Khloé, así como Kylie y Kendall, respectivamente. Además de su mamá, la reconocida empresaria Kris Jenner, quien acudió acompañada de su novio Corey Gamble.

Por parte de Travis, se sabe que sus hijos, Landon Asher y Alabama Luella, a quienes procreó de su matrimonio con Shanna Moakler, Miss USA 1995, fueron los testigos más especiales del baterista de la banda de punk rock Blink-182. De hecho, fue Alabama la que publicó una de las primeras imágenes de la boda y en la que se puede ver a Kourtney y Travis hincados sobre unas sillas mientras se realiza la ceremonia.

Previo al enlace matrimonial, la familia de los novios disfrutó de unos días de descanso a bordo de lujoso yate Regina d’Italia, una embarcación que supera los 17 millones de dólares, que tiene capacidad para 12 invitados y que de acuerdo con el sitio TMZ, fue propiedad de los diseñadores Domenico Dolce y Stefano Gabbana, quienes también asistieron al enlace.

De hecho, varios reportes de diferentes medios de comunicación apuntan que algunos de los diseños que han utlizado Kourtney, Travis y sus invitados a la boda, fueron confeccionados por la firma italiana Dolce & Gabbana, como el mini vestido gótico que lució la novia o el estampado de leopardo que se puso Khloé en la cena de ayer.

Gracias a las imágenes que han comenzado a difundirse en redes sociales, se pudo apreciar que Kardashian eligió un vestido de novia con minifalda y un largo velo que tenía la imagen de la virgen. Por su parte, Travis optó por un tradicional smoking que usó con moño en el cuello.

Según la información que se dio a conocer, cuando todo el clan Kardashian regrese a Los Ángeles, la pareja ofrecerá una espectacular fiesta para todos aquellos que no pudieron presenciar el enlace matrimonial de Italia.