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La activista Nadia Murad, premio Nobel de la Paz en 2018 y que sobrevivió al grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Irak, y la abogada Amal Clooney responsabilizaron hoy a la comunidad internacional de no haber cumplido sus promesas de justicia con los yazidíes, seis años después de unos hechos que la ONU ha reconocido como genocidio.

La joven yazidí participó este lunes en un evento virtual organizado por su ONG y por Naciones Unidas para conmemorar el sexto aniversario de la irrupción de los extremistas en Sinyar, cuna de los yazidíes en el noroeste de Irak, donde la propia Nadia fue secuestrada.

"Cuando el EI lanzó su campaña genocida, mi familia fue destruida, perdí a mi querida madre, sobrinos y seis hermanos, el resto fuimos secuestrados. Mi historia no es única, es la historia de miles de mujeres y chicas yazidíes que fueron capturadas y hechas esclavas sexuales", afirmó.

Seis años después de que los yihadistas secuestraran a miles de personas y asesinaran a muchas otras, casi 2.800 mujeres y niños siguen desaparecidos o en cautividad, denunció Murad.

"No se han tomado acciones colectivas para buscarlos y rescatarlos", remarcó la activista, quien pidió un mayor cuidado a los supervivientes que, como ella, consiguieron escapar.

Subrayó que, "seis años después del genocidio, la comunidad internacional ha fallado a la hora de mantener sus promesas de proteger a los más vulnerables, sobre todo mujeres y niños.

Por ello, le pidió que cumpla sus promesas y juzgue a los responsables de esos hechos.

"Los supervivientes siguen esperando justicia y rendición de cuentas", recordó Murad, que agradeció el trabajo del equipo de investigación de la ONU sobre los crímenes del EI, encabezado por Karim Khan.

Pero destacó que "una investigación no es un juicio" y que los yazidíes siguen esperando que llegue "su día" en un tribunal.

En la misma conferencia virtual, la abogada Amal Clooney, que ofrece asistencia a Murad, solicitó que se establezca un tribunal internacional para juzgar a los responsables del genocidio yazidí.

Según Clooney, no se ha hecho "ningún progreso" en ese sentido desde que ella misma propusiera el año pasado en Naciones Unidas que se juzgue al EI, ya sea con la creación de un tribunal internacional especial o a través de la Corte Penal Internacional o con un tratado entre Irak y la ONU.

Ningún país se ha ofrecido a acoger un juicio internacional y ningún Gobierno ha analizado sus propuestas o ha hecho una contrapropuesta, afirmó.

Sin embargo, "el mundo ha respondido a estas atrocidades en el pasado (...) al menos a los crímenes de genocidio", dijo la abogada, quien puso varios ejemplos de juicios internacionales por genocidio en África, los Balcanes y Asia, que dieron comienzo con más celeridad que en esta ocasión.