Según una investigación realizada en Inglaterra, encargada por Marriage Foundation, las parejas que optan por una boda sencilla tienen más probabilidades de permanecer juntas que aquellas que comienzan su vida con una fiesta de bodas súper costosa.
Los investigadores encontraron que el 10% de los matrimonios que comenzaron con una fiesta muy cara duraron solo tres años.
Asimismo determinaron que el 34% de las parejas que tenían diez invitados o menos en su boda no terminaron divorciándose en una década, casi el doble de la tasa de muestra general.
El director de investigación, Harry Benson, dijo: "Los datos respaldan investigaciones estadounidenses anteriores que sugerían que los matrimonios caros pueden ser malos debido a las deudas".
O Globo (GDA)