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Desde hace años se estudia qué dice sobre nosotros el lenguaje corporal que manejamos. Las expresiones faciales, la postura del cuerpo y hasta la forma de caminar son aspectos que pueden ser definidos por nuestra personalidad.

Están los que prefieren caminar lento y disfrutar el paisaje y otros que parecen siempre apresurados, ¿pero qué quiere decir eso?

Un estudio de la revista académica ‘Social Psychological and Personality Science’ relacionó la forma de caminar con algunos rasgos de la personalidad. En primer lugar, los investigadores, pertenecientes a Francia y Estados Unidos, encontraron que la personalidad afecta la velocidad al caminar y también puede influir en la forma como nuestro ritmo al dar los pasos se transforma con el tiempo.

Los autores explican que se comparó la velocidad al caminar con los cinco grandes rasgos de la personalidad. Estos se dividen en apertura a las nuevas experiencias, amabilidad, conciencia, extraversión y neuroticismo; los cuales fueron descubiertos por Lewis R. Goldberg en 1993. 

El estudio fue realizado con 15.000 adultos que tenían de 25 a 100 años y dictaminó que las personas con puntuaciones altas en extroversión, conciencia y apertura presentaban tendencias a caminar más rápido en comparación con quienes tenían puntuaciones altas en neuroticismo.
Sin embargo, estos individuos disminuían su velocidad a medida que envejecían.

En líneas generales, estos componentes quieren decir:

-Apertura a la experiencia: tiene en cuenta en qué medida un individuo busca nuevas experiencias. También evalúa si una persona es consecuente con sus emociones.

-Extroversión: “Define el grado en que el sujeto se muestra abierto con los demás y canaliza su energía en contextos sociales. Examina cuánto le agrada a un sujeto estar rodeado de otras personas”.

-Amabilidad: evalúa si es una persona tranquila, que confía en los demás y está dispuesta a ayudar a quienes lo necesiten sin que se lo pidan.

-Neuroticismo: “Es aquel que encontramos con alta puntuación en las personas con problemas para equilibrar sus emociones y que suelen experimentar cambios de humor bruscos” .

-Conciencia: son sujetos enfocados en sus objetivos, organizados y que tienen un plan trazado para realizar sus actividades. Además, son muy buenos llevando las ideas de la teoría a la práctica. 

Es importante resaltar que una persona puede tener varias de estas personalidades, según afirma el estudio de Lewis. Con esto claro, es posible entender mejor los resultados arrojados. 

Según ‘BBC’, se han hecho múltiples estudios en ese ámbito, algunos datan desde 1935 y fueron llevados a cabo en países como Japón, Suiza y Reino Unido. Y, aunque se han realizado comparando diferentes rasgos, lo que tienen en común es que todos demuestran que sí hay una relación entre la forma de caminar y la personalidad que tiene una persona.

Además, un dato interesante es que el caminar parece ser un aspecto tan distintivo como la huella dactilar, pues se ha demostrado que la imitación es casi imposible.