Actualidad

La imagen casual y retocada de la vicepresidenta electa de Estados Unidos, Kamala Harris, en la portada de la versión americana de Voguecausó indignación en redes sociales. Vestida con chaqueta negra y zapatillas converse, la vicepresidenta electa fue criticada por parecer demasiado informal y por su piel "aclarada".

Una imagen de la tapa de la edición de febrero de la revista Vogue se filtró el domingo y comenzó a circular en redes sociales. La foto inmediatamente atrajo la atención de los usuarios, que remarcaron la mala iluminación ya que revelaba un tono de piel más claro. También señalaron que la vicepresidenta aparecía más estilizada y algunos sugirieron que era "una falta de respeto" para Harris.

Según informó CNN, los usuarios no fueron los únicos sorprendidos por la elección de tapa de Vogue. El equipo de Harris tampoco esperaba que esa imagen apareciera en la portada de la edición impresa. Una fuente familiarizada con las discusiones dijo que los asesores de la funcionaria creían que la portada la mostraría posando con un traje azul claro sobre un fondo dorado, una imagen que circuló después de que se generara la polémica.

Mientras que en Twitter algunos incluso cuestionaron si la imagen había sido falsificada, Vogue la confirmó como genuina, pero agregó confusión al revelar una segunda portada digital con la foto consensuada con el equipo de Harris.

La fuente de CNN dijo que el equipo de la vicepresidenta esperaba que este atuendo -el traje celeste de Michael Kors- se usara como la foto de portada principal y que el atuendo más informal apareciera dentro de la revista. La misma fuente dijo que los asesores de Harris solicitaron una nueva portada, aunque la versión impresa de la revista salió a la imprenta a mediados de diciembre.

Por su lado, un portavoz de Vogue dijo en un comunicado enviado por correo electrónico que Vogue "amaba las imágenes que Tyler Mitchell tomó y sintió que la imagen más informal capturaba naturaleza auténtica y accesible de la vicepresidenta electa Harris, que sentimos es uno de los sellos distintivos de la administración de Biden y Harris".

"Para responder a la seriedad de este momento en la historia, y el papel que ella tiene que desempeñar para liderar nuestro país, estamos celebrando ambas imágenes como portadas digitales", añadió.

Ambas imágenes fueron tomadas por Tyler Mitchell, quien se convirtió en el primer fotógrafo negro cuyo trabajo aparecía en una portada de Vogue Estados Unidos cuando capturó a Beyoncé para la edición de septiembre de 2018 de la revista. Mitchell publicó solo una de las portadas en Instagram: la de Harris con un traje azul.

Explicando las influencias detrás de las fotos de la portada, Vogue dijo que el fondo verde manzana y rosa salmón se había inspirado en los colores de Alpha Kappa Alpha de la Universidad de Howard, la primera hermandad históricamente afroamericana. Un artículo adjunto dice que Mitchell había querido "honrar los días universitarios de Harris y la mujeres poderosas que forman parte de las filas de las hermandades de mujeres como Alpha Kappa Alpha".

Pero los críticos afirman que las imágenes hacían que su piel pareciera "más blanca" y no concordaba con la glamorosa estética de Vogue. El dramaturgo y abogado Wajahat Ali lo describió como un "desastre", y agregó que la editora en jefe de Vogue, Anna Wintour, "realmente no debe tener amigos y colegas negros", según reportó CNN.

El debate se produce unos días antes de que Harris sea investida como la primera mujer y la primera vicepresidenta negra y del sur de Asia. En un perfil detallado adjunto, publicado en línea por Vogue el domingo, Harris recuerda el momento en que se convocó a las elecciones y su posterior discurso de victoria. También habla sobre el cambio climático y las protestas por la justicia racial.