SALUD

Se acerca Halloweeny a la hora del famoso truco o trato, pensamos en golosinas, caramelos y chupetines. Sin embargo hay que recordar que el exceso de azúcares en los niños, genera un estado de exaltación hace estragos en la paciencia de los padres.

Si calculás cuántas calorías consumirá tu pequeño en dulces de Halloween, probablemente la suma supere las 3.000 a 4.000 y, casi todas, serán de baja calidad.

La consigna en esta fiesta importada y de origen celta, es que los más pequeños salgan a buscar golosinas bajo el lema “truco o trato”. Sin ánimo de ganarme un truco por negar los dulces, presento algunas ideas para minimizar el exceso de azúcares.

Si los niños salen con el estómago vacío a pedir golosinas y esa será su merienda o cena, estamos en un problema. En cambio, si le das una buena merienda, pueden recorrer todo el barrio, pero comerán mucho menos.

Previo a salir, recomiendo hacer una comida saludable. Puede ser leche o yogur acompañado de pan. Complementar con una fruta es una opción, incluso sumarla en licuado ahora que el clima nos tienta a tomar a bebidas frescas.

Si bien los niños desean las golosinas, hay alternativas saludables. Se puede esperar el sonido del timbre con una bandeja pronta para repartir de galletas caseras con formas de calabaza o fantasmitas. Así como los bocados a base de fruta (bananas con forma de dedo y un maní como la uña, escobitas de grisines con queso, mandarinas peladas con un tallito de apio, simulando una calabaza).

Si hacés reunión de pocos niños, sorprendelos con la “poción de bruja” a base de jugos de fruta caseros y sin uso de refrescos y bebidas con azúcares agregados.

Cambiar ese pequeño hábito que nos simula el premio o regalo de cosas aseguradas es una estrategia. El trato puede ser con otro tipo de detalles que gusten a los pequeños. Lápices de colores, libretitas, gomas de borrar alusivas a Halloween.

Es muy importante que los niños en esa famosa recorrida en búsqueda de golosinas, por lo menos, quemen un poco de calorías. Aumentarles el gasto energético es importante, hacé que caminen y corran de casa en casa. Si organizás una reunión planificá juegos donde la base sea moverse (y quemar calorías) y lográ que estén poco tiempo sentados.

Cuando los niños salen a recorrer, los padres suelen acompañar la cacería y a medida que reciben dulces, se los guardan. Ese momento es clave para ir “confiscando” la cantidad de azúcares que reciben. Como adulto responsable, podés optar por separar los que menos gustan y entonces cuando quieran un puñado ya no comerán tanto "con los ojos" y serán más selectivos.

Compartir es buena manera de reducir el botín. En base a eso, decidirán cuántas dejarán sin consumir, o cómo se repartirá lo que juntaron. Si dividen lo que lograron, todos ingerirán menos azúcar.

Al terminar la noche, tenés que ser consciente vendrán unos días de excesos de azucares. Es importante establecer límites y negociar. Una buena estrategia, es separar en porciones sin tener que prohibirles los dulces.

Ser anfitriones es una estrategia para ser eficientes ese día. Supone una forma original de salirse de la rutina y pasar un rato divertido en casa. A veces jugar con la creatividad a través de la comida está permitido y es divertido. En vez de salir a buscar, dulces proponé que los pequeños los cocinen.

Si tenemos hábitos saludables durante todo el año, no es descabellado el exceso de azúcares de una noche. Los hábitos se trabajan a diario a través de las pequeñas decisiones.

Ingredientes:
1 taza de coco rallado seco
6 pasas de uva
Chispas de chocolate
3 bananas
2 tazas de jugo de naranja natural

Preparación:
Cortar las bananas a la mitad a lo ancho y colocales un palito de brochette o helado en el extremo plano.
Congelarlo unas horas, luego sumergirlo en el jugo de naranja.
Bañar en coco rallado (este tiene que estar seco).
Colocar dos chispas de chocolate para simular los ojos y una pasas rellenas para la boca.

Ingredientes:
150g de harina de garbanzos (1 taza aprox) puede ser harina integral o la que tengas
1/2 cdita de sal.
3 cucharadas de aceite
1/2 taza de agua (no fria, natural o tibia)
2 cdas soperas de semillas de sésamo y 1 de semillas de chia o usa directamente un mix de semillas.
1 cda sopera de la especia que te guste
Pimienta a gusto.

Preparación:
Mezclar los ingredientes hasta formar una masa que no se pegue (agregale más agua o harina según sea necesario).
Tapar con film y dejar reposar 10 min. Estirar con palo de amasar hasta lograr el espesor deseado y cortar en rectángulos. dando formas de tumbitas (podes marcarles el clasico R.I.P).
Precalentar el horno y poner las crackers en una fuente pincelada con aceite. Cocinas a horno medio (cinco minutos por lado).
Decorar con mix de semillas o semillas de un solo tipo (sésamo, lino, chia, girasol) condimentos provenzal, pimentón, albahaca, romero, queso en hebras o rallado.

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Lorena Balerio

Licenciada en Nutrición. Dicta charlas y talleres y promueve la alimentación real y saludable. Consultas personalizadas a domicilio y online

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