Hogar

Como siempre digo, tener ordenado o desordenado es solo unadecisión nuestra. Volverse una persona organizada es posible, porque el orden es una habilidad que se aprende.

Te puede resultar incómodo: cambiar es incómodo, salir de nuestra zona de confort es incómodo. Pero este cambio está al alcance de tu mano, todos tenemos la posibilidad de ordenar nuestra casa y nuestra vida.

Organizar tu casa puede ser un proceso complicado. Implica un desafío inmenso porque te obliga a tomar muchas decisiones, a definir quién eres y qué querés para tu vida. Pero el resultado final ¡es increíble!

Nuestro hogar, sus espacios y lo que hay en ellos nos afecta en nuestro interior. Si vivimos en ambientes limpios, ordenados, lindos y que nos hacen sentir bien, nuestro estado de ánimo mejora.

¿Conoces el término “declutter”? Seguro que lo leíste muchas veces…

Es una palabra de origen anglosajón que traducido al español sería: sacar cosas que no necesitas de un lugar, para hacerlo más agradable y útil. Pero: ¿cuándo, por qué y cómo hacerlo?

Cuando te sentís inquieto, incomodo o poco productivo. Cuando el desorden te impide vivir tranquilo. El desorden nos bombardea de estímulos visuales y táctiles de forma constante y abrumadora. Nos estresa, nos distrae y nos impide relajarnos.

Al ordenar nos vamos dando cuenta de que cosas no nos son útiles, no se adaptan a nuestra realidad o no nos traen felicidad.

No tiene sentido organizar algo que ya no queremos o no vamos a usar, por eso te propongo un ejercicio para hacer antes de comenzar con la organización de cualquier espacio. Aunque no es fácil ya que hay objetos que podemos descartar rápidamente y otros que nos generan dudas y nos cuesta más.

Preguntate:
¿Estoy dispuesto a deshacerme de objetos para dejar espacio libre?
¿Pierdo mucho tiempo buscando cosas que no encuentro?
¿El desorden me está provocando malestar?

Si la respuesta a alguna de estas preguntas es sí, este es el momento para empezar a cambiar tu vida.

El comienzo siempre es lo más difícil, pero una vez en movimiento cada vez será más fácil continuar. Cuando decidís rodearte de cosas que realmente querés, que te dan alegría, tu vida se vuelve más simple, tranquila y feliz.
El orden te devuelve tiempo y espacio, te ayuda a aumentar tu energía y disminuir el estrés.

Te aseguro que tener ordenado no le hace mal a nadie. Las rutinas y los buenos hábitos son acciones que nos acercan más a lo que queremos ser y vivir.

El aprender a decidir con que te quedas y que eso es lo que te gusta y te hace feliz, te permite darte cuenta cuál es la verdadera magia del orden.

Porque cuando ordenás tu casa, se ordena tu vida.

conocé a nuestra columnista

Ana Guardado

Es organizadora profesional de espacios y desde hace un tiempo lleva adelante su emprendimiento Ana Gu.

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