Tener una rutina de cuidado antes y después de depilarse es fundamental para obtener los mejores resultados, pero es en realidad uno de los principales errores que se comenten.

Ya sea por limpieza, estética o para sentirnos más cómodos, la depilación se ha convertido en una rutina que se ha vuelto casi indispensable en el cuidado personal. Pero en ocasiones eliminar un par de vellos suele ser contraproducente, ya que hay situaciones en las que se entierran bajo la piel y la hacen lucir irritada.

El principal problema que puede tener cualquier hombre o mujer al momento de querer eliminar los vellos en alguna parte de su cuerpo es que se entierren en la piel creando bultos rojizos pequeños o inclusive picazón y molestias.

Existen ciertas situaciones naturales que hacen que se entierren los vellos provocando inflamación. Esto es más común en zonas con vello grueso que, al momento de querer salir, se curvan dentro de la piel provocando que este crezca por dentro en lugar de exteriorizarse.

La mejor manera de salir victorioso de esta batalla contra los vellos encarnados es contar con una buena rutina de belleza antes, durante y después de la depilación .

No importa en que zona quieras eliminarlos, ya sea en el rostro, las piernas, axilas o cualquier otro lugar del cuerpo, recuerda que tienes que tener una rutina favorable que incluya los siguientes pasos:

• Exfolia tu piel. Una correcta rutina de cuidado personal tiene que incluir una exfoliación. Esta te ayudará a eliminar piel muerta, evitar que se entierren los vellos y permitirá que la piel se renueve constantemente. No obstante, de acuerdo con dermatólogos, exfoliar la piel puede resultar dañino si lo haces constantemente, por lo que se recomienda realizarlo cada 15 días.
• Abre los poros. Uno de los consejos que más van a ayudar para eliminar vellos es permitir que los poros se abran. La mejor manera de hacer esto es con un poco de agua caliente o tibia, lo que además permite una mayor extracción de vellos.
• Utiliza jabones o cremas de afeitar. En ocasiones pensamos que con solo pasarnos la navaja con un poco de agua estamos ayudando a que se deslice mejor, pero estamos cometiendo un grave error. Durante nuestra rutina de depilación es necesario ayudarnos de un jabón o espuma de afeitar para disminuir el riesgo de que se irrite la piel.
• Mantén humectada tu piel. Utiliza productos como cremas hidratantes que solo aumentarán los beneficios para lucir una piel hermosa.

También es buena idea que aprendas a identificar el mejor momento para realizar la depilación. Si notas que tu piel está más sensible de lo normal, por ejemplo, por haberla expuesto al sol, lo mejor es que esperes unos días antes de pasar el rastrillo para no irritarla más.

El Universal (GDA)