Por Nieves Pereyra*
Llega septiembre, y al entusiasmo por cambiar nuestro guardarropa de invierno por ropa más ligera, se une la reevaluación de las prendas que ya tenemos en nuestro armario.
Muchas veces esta combinación, apresurada por las novedades que vemos en las vidrieras, nos lleva a comprar por impulso, y mal. Afortunadamente, no necesitás salir a comprar todo un guardarropas nuevo para renovar tu imagen.
Con los elementos básicos de primavera-verano que casi todas tenemos (faldas, vestidos, camisetas y blusas manga corta, prendas de lino y algodón) más la incorporación de algún elemento de las nuevas tendencias que te contaremos en esta nota, podrás armar conjuntos de primavera que se sientan frescos, novedosos y se adapten a tu estilo propio, sin tener que exprimir el saldo de tu tarjeta de crédito. ¿Empezamos?
Clásico
Si tu estilo es clásico esta primavera-verano estás de parabienes. Revisá a fondo tu placard porque es muy probable que puedas sacarle partido a esas piezas de fondo de armario que tenés hace mucho.
En redes no paramos de escuchar que lo que está “de moda” es el “Old money” o el “lujo silencioso”.
La realidad es que pasada la euforia inicial del maximalismo post pandémico, lleno de colores fuertes, volúmenes enormes y grandes y coloridos estampados, experimentamos la vuelta a lo clásico y atemporal, como sucede siempre con los ciclos de la moda.
¿La base de esta tendencia?: Siluetas y patrones de diseño minimalista y sastrero, unidos a una paleta de colores practicamente neutra: blanco, negro, azules, beige, grises. Sin grifas a la vista. Abrigos como gabardinas y blazers, son los básicos de armario de este estilo.
Los accesorios son simples y medidos: zapatos y sandalias de taco medio, mocasines y ballerinas. Carteras sobrias en modelos clásicos y mucha joyería que parece heredada de nuestras abuelas. ¿Las perlas?: Un must.
Blanco y negro
En consonancia con el lujo silencioso, también podemos apreciarlo en los estampados. Esta temporada mantenemos las grifas chicas y los estampados sutiles.
Casi no vemos patrones étnicos y la combinación dominante es el blanco y negro.
Vemos la paleta cromática considerada elegante por excelencia, en rayas, lunares, pata de gallo, flores. Los estampados remiten a lo clásico, lo chic, lo europeo.
Basta con observar cualquiera de las tiendas de marcas internacionales acá en Montevideo, para verlo: un mar de propuestas en blanco y negro nos reciben apenas entrar. Coco Chanel estaría encantada.
Jean con jean
En blazers, camisas, polleras. El jean fue el textil más usado este otoño invierno y continua su momento de gloria esta primavera.
Los más jóvenes llevan la denim manía a todo, incluídos los accesorios, pero si como yo, ustedes vivieron su adolescencia o juventud a principio de los años 2000, ya saben cómo funciona esta combinación: mezclar dos tipos de jeans similares en vaquero y camisa, adoptar un lindo vestido camisero y llevarlo con championes blancos. Ir un paso más allá y elegir una gabardina para abrigarnos en esta primavera, en tela de jean. ¿La prenda más deseada? La falda vaquera.
Faldas
Si vas a invertir en algo nuevo esta primavera, que sea una falda midi o larga. Son un elemento de fondo de armario versátil que podemos modernizar fácilmente de un año al siguiente, manteniendo su rotación por muchas temporadas.
Las que están en tendencia son las vaqueras, pero cualquier falda de largo medio a maxi es una prenda que pasa fácilmente del día a la noche con el cambio de accesorios. Se ven en una gran variedad de estilos. Las encontramos en jean, cuerina, satén (faldas lenceras), punto de algodón (perfectas para el verano) y lino. La clave es buscar el largo que te resulte más cómodo, y el textil que combine de manera más eficiente con el resto de las piezas de tu armario.
Verde
En moda, los colores entran y salen de los percheros todos los años, pero los tonos verdes en todas sus formas se imponen en esta primavera 2023. Uno, especialmente, ha sido el color del verano en el hemisferio norte: el chartreuse.
Este tono, una especie de híbrido entre lima y pera, y que recibe su nombre del licor francés, tuvo su momento de auge en los años de 1960. Desde Twiggy en la tapa de Vogue, hasta Marilyn Monroe. Todas las It girls de la década supieron llevar ese color, al igual que la reina Letizia de España, la princesa de Gales o Kendall Jenner este 2023.
Si querés incorporar verde a tu guardarropas pero no te animás a este tono, te recomiendo comenzar por alguno de los tonos más utilitarios: olivas, azulados, verde inglés.
Zapatos
Cuando se trata de tendencias de calzado primavera verano 2023, las ballerinas son el objeto preciado.
En blanco, negro y beige, en su versión más clásica y metalizadas para las más osadas, integran el uniforme que observamos en todas las fotos de street style de las grande ciudades: jean clásico, camiseta blanca, gabardina y ballerinas.
Las guillerminas que compraste en otoño, se siguen llevando. Así que si tenés un par y estaban guardadas por el frío del invierno, es ahora de sacarlas a la calle nuevamente.
Los mocasines son otra pieza que podés tener del año pasado y reutilizar esta primavera. Si buscás un par nuevo en tendencia, la combinación este año es la blanco y negra como era de esperarse. En su versión destalonada son perfectos para quienes no gustan de mostrar sus pies en verano, pero tampoco están dispuestos a morir de calor.
En championes, los modelos retro de los aós 1980 y 1990 seguirán en tendencia.
Las sandalias se llevarán minimalistas, con tiras gruesas, o finas. Con respecto a estas últimas recomiendo probarlas tranquilas porque pueden resultar lindas, pero engañosas. Nada peor que una tira fina cortándote el pie un día de verano con 35 grados de temperatura.
Para las que necesitan altura, este verano puede ser un poco polarizante aunque no todo es plano. Vamos a ver un montón de plataformas enteras, al mejor estilo principios de los años 2000.
Metalizados
2023 es el año que la plata le ganó al oro.
Lo vemos en prendas como pantalones, faldas, chaquetas de abrigo, y principalmente en accesorios, tales como zapatos y carteras.
¿La forma más sencilla de añadir un toque de plata a tus conjuntos sin sentir que es demasiado? Bajá lo brillante con prendas más básicas y apagadas. El plata funciona muy bien con azul marino, negro, grises y blancos sin parecer tan “navidad”.
Llevalo en pequeñas dosis: zapatos, una cartera. Hay mucha oferta en este momento, y siempre recordá que de todas formas, no tenés porqué adoptar todas las tendencias. Lo ideal es sumar solo aquellas que nos hagan sentir cómodas y reflejen nuestro estilo propio.
En lo que respecta a la joyería, vemos un retorno a la plata, ya sea con joyas de fantasía más dramáticas o en la oferta de las marcas para la bijou de todos los días. Mientras al dorado lo asociamos con valores más tradicionales, el plata, más futurista, más galáctico, más moderno, viene a comunicarnos que el ciclo de la moda no descansa nunca. Podrá mirar al pasado en este momento, pero ya está preparando al futuro para su regreso.
Nieves Pereyra
Estilista de moda, fan del estilo propio y de repetir outfits. Egresó de Licenciatura en Lingüística en la Facultad de Humanidades de la Universidad de la República; estudió diseño y debido a su interés en la semiótica de la moda llegó al asesoramiento de imagen. En 2019, armó su primer curso sobre Armarios inteligentes.