Mujeres
Un estudio concluye que la pandemia ha supuesto una carga para los padres, especialmente para las madres solteras, y ha influido en su salud mental.
La pandemia ha exacerbado las desigualdades de género en las tareas domésticas, el cuidado de los hijos y la salud mental de las mujeres, según un estudio del University College de Londres (Reino Unido), publicado en la revista científica PLOS ONE.
El estudio, realizado en el Reino Unido, concluye que, en marzo de 2020, durante el primer confinamiento decretado por el coronavirus, las mujeres dedicaron más tiempo a las tareas no remuneradas como el cuidado de los hijos y del hogar, fueron más propensas a reducir su jornada laboral y manifestaron mayores niveles de malestar psicológico.
Liderada por Baowen Xue y Anne McMunn, del University College de Londres, la investigación explica que antes de la pandemia, otros estudios ya habían demostrado que las mujeres del Reino Unido dedican más tiempo al trabajo de cuidados no remunerado que los hombres.
Para saber si la pandemia había agravado la situación de las mujeres, los autores usaron datos del estudio Understanding Society covid-19, que forma parte de un macroestudio que se lleva a cabo en el Reino Unido desde 2009.
En 2020, se invitó a los participantes de las últimas oleadas del estudio Understanding Society a completar una encuesta web cada mes sobre sus experiencias durante la pandemia: 17.452 voluntarios completaron la encuesta en abril y 14.811 en mayo.
De media, en abril y mayo de 2020, las mujeres dedicaron unas 15 horas semanales a las tareas domésticas, mientras que los hombres no llegaron a 10 horas semanales.
Las mujeres dedicaron 20,5 horas semanales al cuidado de los niños y a la educación en casa en abril, y 22,5 horas semanales en mayo, mientras que los hombres dedicaron unas 12 horas a estas responsabilidades en ambos meses.
En general, dentro de las parejas, las mujeres eran responsables del 64% de las tareas domésticas y del 63% del cuidado de los niños.
Además, los padres trabajadores eran un 5% menos propensos a reducir las horas de trabajo y un 7% menos propensos a cambiar sus patrones de trabajo debido al cuidado de los niños o la educación en casa, en comparación con las madres trabajadoras.
En cuanto a la salud mental, el estudio descubrió que el aumento de las tareas domésticas y de las horas de cuidado de los niños/educación en casa se asociaba a niveles más altos de malestar psicológico entre las mujeres en abril, pero no se encontró ninguna asociación significativa entre los hombres.
Los niveles de malestar psicológico eran especialmente elevados cuando solo uno de los padres adaptaba sus pautas de trabajo a las necesidades del hogar y en el caso de las madres solteras.
Los autores concluyen que la pandemia de covid-19 ha supuesto una carga para los padres, especialmente para las madres solteras, y ha influido en su salud mental.
Según los autores, es importante que tanto las parejas como los empleadores sean conscientes de los continuos prejuicios de género porque "sigue existiendo desigualdades de género en la división del trabajo de cuidados no remunerado", concluyen.