Es bastante común que se utilicen los llamados ‘remedios caseros’ para tratar distintas enfermedades del cuerpo. Siempre lo recomendable es asistir al médico, pero también pueden sumarse las opciones más naturales. Así hacemos al sumar vitamina C para tratar resfriados o consumimos frutos rojos para combatir la anemia, entre otros.

Hoy te contamos cómo proteger el páncreas y el hígado, órganos esenciales para el correcto funcionamiento del cuerpo humano.

Según el departamento de medicina de la Universidad de Stanford, el hígado regula la mayor parte de los niveles químicos de la sangre y excreta la bilis. Es decir, “toda la sangre que sale del estómago y de los intestinos atraviesa el hígado. Este la procesa, separa sus componentes, los equilibra y crea los nutrientes para que el cuerpo los utilice”.

Adicionalmente, procesa los medicamentos ingeridos por un paciente para que sean absorbidos correctamente.

Para garantizar que esté sano, el blog de salud ‘Cuerpo y mente’ señala que los siguientes alimentos son muy beneficiosos: verduras crudas, germinados, hojas verdes, fermentados y proteínas de calidad, además de la cúrcuma.

Bebida de alcachofa

Esta es una de las verduras que mayores beneficios aportan al hígado. Podés ponerle un poco de limón y comerla así, pero si preferís una infusión, esta es la receta:
- Lavar bien las hojas frescas de alcachofa.
- Hervir una taza de agua.
- Incorporar las hojas y dejarlas hervir durante 10 minutos
- Retirar del fuego y dejar reposar hasta que adquiera la temperatura deseada.
- Colar la bebida y servir.

Batido de banana y cúrcuma

La cúrcuma es esencial, sus propiedades antioxidantes previenen daños en el hígado. La banana, por su parte, tiene un alto contenido de hierro, potasio, ácido fólico y zinc. Juntos son una fuente importante de nutrientes.

Imagen de Steve Buissinne en Pixabay

- Licuá una taza de leche vegetal, una banana, media cucharada de cúrcuma y una de jengibre en polvo. Esta preparación es ideal para tomar en ayunas.

El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas (NIH) de Estados Unidos explica que el páncreas tiene tanto funciones digestivas como hormonales.

“El páncreas produce un jugo digestivo que tiene enzimas que descomponen químicamente los carbohidratos, grasas y proteínas”, señala en su sitio web. Además, es el que suministra este jugo al intestino delgado a través de pequeños conductos.

Son principalmente las frutas las que cuidan este órgano, pero si no quiere solo preparar ensaladas dulces, ¿qué mejor que seguir recetas sencillas para incorporarlas a su dieta?

Manzana con canela
El portal ‘Mejor con salud’ recomienda preparar las manzanas al horno para disminuir su azúcar natural. Más bien, luego podés agregarle canela para darle un toque diferente. Este último ingrediente también reduce los niveles de azúcar en la sangre.

“Esta fruta es un gran tesoro de vitaminas, que, combinada con canela, nos aporta grandes virtudes digestivas, antiinflamatorias y regenerativas”, dice el portal.

Postre de higo
El higo es una de las frutas que mayores beneficios aporta al organismo, controla los niveles del colesterol, facilita el tránsito intestinal y controla el peso al producir una sensación de saciedad.

Puede consumirse a la hora del postre en una tarta, por ejemplo. Es muy saludable si se elabora con harina de avena:
Receta:
- Precalentar el horno a 180 grados centígrados y engrasar un molde con manteca.
- En un bowl mezclar 130 gramos de manteca, 165 gr. de azúcar y ralladura de limón y naranja, hasta obtener una consistencia esponjosa.
- Añadir un huevo, batir y repetir el proceso sumando dos huevos más.
- Agregar 180 g de harina de almendra y 74 g de harina de repostería, además de medio sobre de levadura.
- Una vez mezclado, vertir en el molde previamente enmantecado y agregar la cantidad de higos que desee en mitades o cuartos, cuidando la presentación.
- Luego, espolvorear almendras laminadas y hornear durante 50 minutos.
- Para finalizar, agregar miel en la superficie.