SALUD
Esta planta proviene de la misma familia de la menta y la hierbabuena; sus hojas se utilizan para hacer medicamentos que ayudan a combatir el resfriado común, neumonía, fatiga y otras dolencias.
El poleo es una planta aromática, que proviene de la misma familia de la menta y la hierbabuena. Ofrece una serie de propiedades para la salud, sirve para aliviar problemas digestivos y cuando se aplica directamente en la piel, ayuda a mejorar los procesos de cicatrización.
Por otro lado, la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU. asegura que las hojas de esta planta se usan para hacer medicamentos que ayudan a combatir el resfriado común, neumonía y fatiga.
A su vez, el aceite de poleo es empleado como repelente de pulgas para mascotas y como fragancia para los detergentes, perfumes y jabones.
Según el portal ‘Mejor con Salud’, el poleo contiene minerales como potasio y fósforo, y puede utilizarse como relajante, expectorante, antimicrobiano y además ayuda a estimular el apetito.
Otro beneficios del poleo
Según un estudio realizado por el National Research Centre de Egipto, las infusiones de esta planta tienen propiedades digestivas gracias a que contiene antiespasmódicos, que ayudan a combatir el dolor abdominal y las flatulencias.
El portal ‘Cuerpo Mente’ también indica que el poleo puede favorecer la secreción de bilis y facilitar la eliminación de cálculos en la vesícula.
Por otro lado, sirve como relajante ya que el aroma y el sabor de esta menta ayudan a disminuir el nerviosismo, así lo afirma una investigación realizada en Brasil por la Universidad Federal de Ceará.
El poleo también es usado en varias partes del mundo para mejorar los procesos de cicatrización. Una investigación realizada por la Universidad Estadual de Santa Cruz, en Brasil, afirmó que puede utilizarse para limpiar heridas gracias a su poder antimicrobiano.
Esta planta puede ser masticada o hervida en infusiones. Es importante que antes de consumirla, consulte con su médico.