Consejos para evitar accidentes domésticos y qué hacer cuando ocurren

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Lucía Torroba

SALUD

La cirujana plástica Lucía Torroba Werner señala cuáles son los imprevistos más frecuentes y recomienda qué hacer si ocurren

Convivencia, encierro y preocupación. El estrés de estos días pandémicos puede llevar a distracciones y situaciones imprevistas. “Es una mezcla explosiva para accidentes domésticos”, puntualiza Lucía Torroba Werner, médica cirujana que a partir de esta semana será columnista de Eme y compartirá su mirada sobre temas de salud, cirugía y belleza desde una perspectiva distinta.

“Madres y padres cocinando distraídos, puertas que se cierran de golpe, vasos que se caen, niños que se golpean, alguien que improvisa armar cosas con herramientas sin protección”, señala la profesional y aconseja cómo evitar momentos no deseados y accidentes en casa.

Dejar espacios libres para que los niños puedan moverse, correr, jugar en el hogar es el primer consejo. Torroba asegura que en momentos como estos, lo más conveniente es guardar adornos innecesarios para no estar pendiente de qué tocan los pequeños o si algo se cae al suelo, se rompe y alguien resulta lastimado. En este punto, Torroba remarca: “Hay que guardar bien esos adornos porque los niños más pequeños, encerrados semanas en su hogar, serán los mejores exploradores”.

Los adultos también deben redoblar cuidados. No faltan quienes en días de confinamiento voluntario optan por dedicarse a las reparaciones domésticas. En este caso, la médica recomienda usar las herramientas siempre con cuidado y utilizar una protección adecuada (valen guantes, lentes, zapatos adecuados, etcétera).

En cuanto a los pequeños, es tajante: “Si el niño no lo sabe usar, no lo puede agarrar” y en esto, incluye desde un vaso de vidrio, un cuchillo o una herramienta como el martillo.

Puntos débiles

El termo del mate, la taza de té hirviendo, la puerta caliente del horno y las ollas y calderas son otros puntos a tener en cuenta porque no perdonan distracciones. A la hora de cocinar es conveniente usar las hornallas de atrás y hay que acostumbrarse a verificar que los mangos de sartenes y ollas no sobresalgan (para evitar chocarlos o que los niños pequeños los alcancen).

La hora del baño también puede generar estrés. A veces la combinación de padres agotados y los niños hiperactivos termina en apurar a los pequeños a entrar o salir de la ducha, lugar donde pueden resbalarse. Cada adulto sabrá qué le hace mejor a su hijo, si una ducha corta o un baño liberador, pero sí es necesario disminuir el riesgo de caídas a la salida.

Por otra parte, no solo los niños se verán afectados por quedarse en casa. En días de encierro y convivencia 24 horas al día, también los animales se estresan. “Hay que pensar en válvulas de escape para las mascotas, su comportamiento seguramente cambiará”, advierte la profesional.

Qué hacer en cada caso

Ante imprevistos, es necesario saber cómo actuar. Si se trata de una herida con sangre, la médica recuerda que hay que aplicar comprensión directa sobre la misma, pero no hacer ningún torniquete. “Compresión directa, con lo que tengas, sobre la herida que sangre”, ésa es la indicación.
En el caso de una quemadura, lo primero será aplicar agua corriente fresca. Si se trata de un golpe, lo inmediato será aplicar frío.

“Por encima del griterío y el susto, hay que tener paciencia. Luego se podrá revaluar la situación para discernir si es necesario llamar al médico o emergencia móvil.

“Es mejor pensar estos días con estrategia, reinventándose. No dejar entrar el virus, pero tampoco las pretensiones, los mandatos, ni el pánico. Que la casa se convierta en un refugio”. Y por último, Torroba subraya: “No hay que culparse, todos hacemos lo mejor que podemos”.

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