Bienestar
Nuestra nutricionista de cabecera nos trae una guía para que la alimentación en verano no sea una pesadilla.
¡Bienvenida la temporada estival por esta parte del mundo! Este año los pronósticos preven una temporada de temperaturas muy elevadas. Pese a ello ,esta época del año es una gran aliada para ayudar a mejorar nuestra alimentación. Hoy te resento una guía rápida para alimentarte en verano.
Aunque muchos se encuentren de vacaciones, es importante no cambiar la estructura de nuestro menú. ¿Qué quiero decir? Nos suele pasar que vamos a la playa y no llevamos nada de comer pasando largas horas en ayuno o llevamos snacks que te dan un picoteo intenso a lo largo del día. Es fundamental mantener las estructuras de las comidas que habitualmente hacemos en casa.
Es importante no pasar por alto que las altas temperaturas aumental deshidratación. Hace unos días les comente algunas ideas para aumentar el consumo de agua enseñándoles algunas ideas de aguas saborizadas.
Lo ideal es beber más líquidos y poner primeros en la lista aquellos alimentos frescos como frutas y verduras, que además de ser ricas
en vitaminas, minerales y fibra, son excelentes rehidratadores naturales.
Aquellos alimentos más secos, y los llamamos así porque son los que en su
composición natural tienen menos contenido de agua, como cereales, carnes y aceites, no se deben eliminar, pero si bajar su consumo.
En el caso de las carnes preferir las blancas, que presentan una mayor digestibilidad que las rojas, y evitar el sentirse pesado después de comer con 30 grados.
Una buena guía es armarnos un menú o tentativa de ideas de comida para la semana. Eso nos ayudará para armar platos que permitan una dieta variada. Además, evitaremos comer siempre lo mismo, organizamos las compras (sobre todo ahora que tenemos que cuidar nuestra movilidad y no ir por solo una cosa al supermercado) y lograrán ahorrar.
Cuidados de verano
En el supermercado es importante comprar lo que es necesario guardar en
heladera, al final de esta manera nos aseguramos que la cadena de frio se rompa por menos tiempo.
Este punto es importante, porque cuando la cadena de frío se rompe aparecen las gastroenterocolitis de verano: peligrosas especialmente para niños y adultos mayores.
En la heladera de casa, es ideal conservar los restos que no se han consumido en recipientes tapadas y siempre respetando que lo cocido va arriba y lo crudo abajo, para evitar contaminación cruzada a los productos.
A la hora de cocinar es ideal que, teniendo en cuenta el protocolo GACH, respetemos las consignas difundidas para las fiestas:
- la persona que cocina debe lavarse las manos continuamente
- que preferentemente solo ella manipule los alimentos
- que los productos de consumo crudo se laven bien
En la playa
Si vas a estar en la playa por largos periodos, además de usar protector e ir a horarios adecuados, recomiendo que si llevás comida, lo hagas en una conservadora, para mantener el frío de bebidas y alimentos.
Si usás sándwiches variá el contenido: se puede intercalar pollo, carne fría, huevo, atún, lechuga, tomate, entre otros. También es preferible el uso de panes integrales, utilizando rodajas finas.
Si tenes tuppers individuales y una buena conservadora, podés armar ensaladitas de fruta individuales.
MIentras que si llevás fruta fresca y yogur ¡siempre en conservadora!
Dietas shock de verano
Es común que esta sea la época que tratamos de perder peso, y por lo general se busca hacerlo de manera autodidacta y usando método más rápido con cambios en nuestra alimentación bajo los parámetros de las dietas milagro.
Me gustaría aclararte que estas técnicas, que consiguen una pérdida de peso inicial, pueden ser riesgosas para tu salud. Sin contar que a largo plazo se recupera el peso perdido y más.
Es mucho más saludable incorporar hábitos alimentarios que perduren en el tiempo y llevar un estilo de vida activo.
Siempre será un licenciado en Nutrición el profesional idóneo para que incorpores hábitos acordes a tu estilo de vida y rutina.