BIENESTAR
La especialista señaló, en base a una investigación, cómo influye cada comida en el órgano. ¿Cuánto deberíamos comer de cada uno?
La alimentación es fundamental no solo para el físico, sino también para nuestrocerebro.
Así, la doctora Uma Naidoo, psiquiatra de la Universidad de Harvard y nutricionista, elaboró un listado de alimentos en base a una investigación que realizó con más de 100 pacientes, que la visitaban para aprender sobre la mejor forma de alimentarse.
“Cuando las personas se enteran de que soy psiquiatra, investigadora de la salud del cerebro y nutricionista, a menudo me preguntan cómo deben comer para maximizar el increíble poder de la mente”, explicó.
Por un lado ubicó a las especias, que más allá del sabor que dan a las comidas son conocidas por sus propiedades antioxidantes. O sea, ayudan al cerebro a combatir las moléculas dañinas y, por lo tanto, previenen el estrés oxidativo que puede dañar los tejidos. Tanto la cúrcuma -que ayuda a disminuir la ansiedad- como el azafrán son muy beneficiosos.
En 2013, un metaanálisis de cinco ensayos analizó los efectos de la suplementación con azafrán en los síntomas de depresión entre los participantes con trastorno depresivo mayor.
En otro aspecto, la nutricionista, que hizo públicas sus claves en una columna para CNBC, ubicó a los alimentos fermentados, que se elaboran combinando leche, verduras u otros ingredientes crudos con microorganismos como levaduras y bacterias.
“Algunos ejemplos incluyen yogur natural con cultivos activos, chucrut, kimchi y kombucha. Todas estas son fuentes de bacterias vivas que pueden mejorar la función intestinal saludable y disminuir la ansiedad”, dijo. Y señaló: “Una revisión de 45 estudios realizada en 2016 indicó que los alimentos fermentados podrían proteger el cerebro de los animales, mejorando la memoria y ralentizando el deterioro cognitivo”.
En su columna, la nutricionista señaló: “El chocolate amargo es una excelente fuente de hierro, que ayuda a formar la cubierta que protege las neuronas y ayuda a controlar la síntesis de los químicos y las vías químicas involucradas en el estado de ánimo. En 2019, una encuesta transversal de más de 13.000 adultos encontró que las personas que comen chocolate amargo con regularidad tenían un 70% menos de riesgo de síntomas de depresión”.
Por su parte, también, apuntó que “el consumo de paltas aumenta el magnesio”, que es importante para el correcto funcionamiento del cerebro.
“Varios estudios en donde los pacientes fueron tratados con 125 a 300 miligramos de magnesio han demostrado una rápida recuperación de la depresión mayor, a menudo en menos de una semana”, detalló. Y, en ese sentido, señaló: “Las nueces tienen grasas y aceites saludables que nuestro cerebro necesita para funcionar bien, junto con vitaminas y minerales esenciales, por ejemplo, el selenio en las nueces de Brasil”. Los efectos antiinflamatorios y antioxidantes de los ácidos grasos omega-3 en las nueces son muy prometedores para mejorar el pensamiento y la memoria.
Por último, la especialista recomienda el consumo de vegetales de hoja verde como la lechuga o el coliflor ya que contienen vitamina E, carotenoides y flavonoides, que son nutrientes que protegen contra la demencia y el deterioro cognitivo.