El Universal (GDA)
El acto sexual se considera una actividad aeróbica porque involucra el movimiento de varios músculos y según la intensidad que apliques, puedes quemar entre 50 y 100 calorías. Esto de acuerdo con información de UNAM Global. Pero ¿alguna vezte habías preguntado si el sexo es una manera de hacer ejercicio?
Aunque al tener relaciones sexuales hay desgaste físico, movimientos musculares y hasta quema calórica, según el estudio “¿el sexo es ejercicio? y ¿es duro para el corazón?” publicado en Harvard Health Publishing, esta práctica no se considera como ejercicio pues “los hombres parecen gastar más energía pensando y hablando de sexo que en el acto mismo”.
Para llegar a esa respuesta, investigadores de Harvard evaluaron a 19 hombres con una edad promedio de 55 años. Esto, a partir del planteamiento de que al llegar a cierta edad, entre los hombres surge la incógnita de si el sexo es demasiado agotador para su corazón o resulta una buena manera de hacer ejercicio.
El sexo como ejercicio
Durante el estudio realizado a 13 mujeres y 19 hombres se revisaron los efectos cardiovasculares en su actividad sexual privada. A los voluntarios y voluntarias se les tomaron lecturas de frecuencia cardíaca y la presión arterial; mientras se ejercitaban en la caminadora y cuando sostuvieron relaciones sexuales.
Los resultados que obtuvieron fueron catalogados como “un tanto decepcionantes”, esto debido a que tanto para los hombres “la caminadora resultó ser más extenuante”. De acuerdo con el estudio, los resultados se midieron en una escala de intensidad del 1 al 5, siendo 5 la más alta y los hombres “evaluaron el ejercicio en cinta rodante como 4.6 y el sexo como 2.7.
En el caso de las mujeres, la situación no fue tan distinta incluso en términos de “frecuencia cardíaca, presión arterial e intensidad percibida del esfuerzo” para ellas resultó menos agotador.
Los científicos expresaron que “parece que los hombres gastan más energía pensando y hablando de sexo que en el acto mismo, ya que la frecuencia cardíaca durante los encuentros sexuales raramente superó los 130 latidos por minuto y su presión sistólica (el número más alto que se registra cuando el corazón bombea sangre) casi siempre se mantiene por debajo de 170.
Por lo tanto, dijeron que “si un hombre puede subir dos o tres tramos de escaleras sin dificultad, debe estar en forma para el sexo”. Y recomendaron que sin importar las condiciones de salud “la mejor manera de mantener el sexo seguro es mantenerse en forma evitando el tabaco, haciendo ejercicio con regularidad, comiendo una buena dieta, manteniéndose delgado y evitando demasiado alcohol”.