NEGOCIOS

Uruguay sumará marcas internacionales y franquicias

Datos y reflexiones del congreso internacional We Franchise celebrado en Montevideo.

Compartir esta noticia
Marc Vidal, analista económico y consultor internacional en transformación digital.
Marc Vidal, analista económico y consultor internacional en transformación digital.

El negocio de las franquicias está en auge en el mundo y la región también. En Uruguay, hay espacio para que este modelo de negocios inicie una fuerte expansión.

El 74% del mix comercial de Montevideo Shopping, Portones Shopping y Tres Cruces Shopping —centros comeciales administrados por el Estudio Luis E. Lecueder—, se compone un 74% de marcas gestionadas de forma directa, de las cuales 66% son uruguayas y 8% extranjeras. En tanto, el 26% son franquicias, de las cuales un 20% responden a marcas extranjeras y 6% son marcas uruguayas. Los datos pertenecen a Carlos Alberto Lecueder, quien participó como conferencista en el encuentro internacional We Franchise celebrado en Radisson Montevideo Victoria Plaza Hotel.

“Hoy grandes marcas que ingresaron en forma directa, se han transformado en franquicias”, dijo Lecueder para agregar que “surgen empresas que obtienen la master franquicia para determinadas zonas y las marcas avanzan bajo sus paraguas desde Chile, Panamá, México y Paraguay”.

Con una mirada a futuro, el empresario proyectó“más marcas internacionales y más franquicias”.

We Franchise marcó la evolución de la Feria Internacional de Franquicias que la empresa Surplus ha desarrollado desde hace 14 años.

Gabriel Grasiuso, CEO de Surplus Internacional.
Gabriel Grasiuso, CEO de Surplus Internacional.
Leonardo Maine/Archivo El Pais

“Hemos reunido conocimiento, metodologías, empresas innovadoras, empresarios destacados, oradores referentes, emprendedores, buenas prácticas, tendencias, productos, servicios, herramientas, técnicas, proveedores, testing, motivación, experiencias, entre otras propuestas”, indicó Gabriel Grasiuso, CEO de Surplus Internacional, consultora especializada en el sistema de franquicias.

El cierre de la actividad, que contó con una larga lista de destacados speakers internacionales, estuvo a cargo del español Marc Vidal, consultor en transformación digital. A continuación compartimos algunos de sus reflexiones.

—“Se dice que la robotización y la inteligencia artificial van a acabar con la vida humana, van a acabar con nuestros trabajos, que vamos a terminar pidiendo dinero a los robots... y eso nunca va a pasar. Porque una máquina nunca le va a sacar tú empleo, sino que va a ser una persona que se llevará mejor que ustedes con ese robot o inteligencia artificial”.

—“El país con más robot per cápita es Corea del Sur, donde no hay desempleo. Y el país con menos robot per cápita de Europa es Grecia, que es el país europeo con más desempleo”.

—“Lo cierto es que la influencia se logra gracias a los datos y, especialmente, nos interesa qué hacen las personas, y a partir de ahí vamos leyendo los datos que luego se transforman en información. Pero en la economía de datos, eso ya no es suficiente. Necesitamos que alguien le dé sentido a esa información, para que se transforme en conocimiento”.

—“Los datos se extraen automáticamente y un software lo transforma en información, pero tiene que haber un ser humano que le dé sentido a esa información para que acabe siendo conocimiento para la compañía”.

—“La inteligencia artificial primero no es inteligencia ni artificial. Son datos masivos generando estadísticas que nos parecen memorables, pero no lo son, y a veces se equivocan”.

—“Si confrontamos la opinión de los tecnólogos con los científicos, que son las dos maneras de medir la inteligencia artificial, los tecnólogos nos dicen que es irremediable que la inteligencia artificial tome conciencia algún día. En cambio los hombres y mujeres de ciencia dicen que no tienen ni idea cómo se puede llegar a eso; se niegan a creer que eso sea inevitable. Entonces hay que asumir lo que es: una tecnología. Simplemente es un ayudante más, que trabaja con nosotros”.

—“El ser humano vive todas las revoluciones tecnológicas como una crisis, como un parto doloroso... Hasta que no trascurre un tiempo, no llegamos a entender que toda esa tecnología es para beneficio de la humanidad”.

—”En marzo 2020 nos hizo despertar la Organización Mundial de la Salud (OMS) porque hacía 20 años que seguíamos haciendo las cosas como en el siglo XX y estamos en el siglo XXI. Y eso nos hizo pensar que esa gran revolución se llamaba teletrabajo y obviamente esa no es la revolución, que es mucho más compleja”.

—“El mundo es un avión de cuatro motores, desde el punto de vista económico, donde prácticamente ninguno está marchando. Hoy sólo nos mantenemos con las exportaciones (comercio exterior), que todavía arrastra. Un avión puede volar con un solo motor, pero es muy complicado y mucho más cuando no hay piloto como pasa en algunos países”.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar