El concepto de la calidad de vida gana protagonismo entre quienes alcanzan la tercera edad. Ya no es suficiente vivir una larga existencia: ahora también se persigue llegar a viejo en el mejor estado físico y mental. Una alimentación adecuada es el primer paso para lograrlo, pero enmarcada dentro de un estilo de vida saludable, que comprenda también la práctica de ejercicios y el abandono de hábitos perjudiciales como el tabaco, alcohol, auto medicación, sin olvidar la importancia de mantener la mente ocupada en actividades de ocio.
1) Energía. La alimentación debe aportar menos calorías que en las etapas jóvenes de la vida, pues de lo contrario se tiende a engordar fácilmente. A partir de los 65 años, el nivel de azúcar es con frecuencia más elevado de lo normal, por lo que se recomienda consumir menos dulces y repostería. En cambio, los cereales como el pan y la pasta, las papas y las legumbres, deben figurar en la comida de cada día. No es aconsejable abusar de los alimentos grasos, mayonesa, manteca, quesos, fiambres y patés, porque están relacionados con el aumento del colesterol y los triglicéridos.
2 ) Proteínas. Basta con tomar cada día la cantidad suficiente de leche y lácteos; carne, pescado o huevos en las principales comidas. Resulta beneficioso tomar dos vasos de leche por día, o un vaso de leche y un yogur.
3) Elementos reguladores. (vitaminas, minerales, agua y fibra): se trata de sustancias que regulan todos los procesos que tienen lugar en el organismo. Por ello, es recomendable comer diariamente algo de verdura y fruta fresca.
Asimismo, resulta importantísimo tomar la cantidad suficiente de líquidos, especialmente en temporadas de calor intenso. Ingerir agua, jugos de frutas, infusiones, caldos desgrasados o de verduras y sopas, gelatinas de sabores, etc., a lo largo del día ayuda a limpiar el organismo (menor riesgo de infecciones urinarias y respiratorias) y se conseguirá evitar la deshidratación.
Es necesario tener en cuenta que ninguna modalidad dietética sirve para todas las personas, la alimentación debe ajustarse a las necesidades particulares en función de diversos factores. Sin embargo, las recomendaciones generales benefician a todas las personas mayores, permitiendo cubrir las necesidades de energía y de otras sustancias aprovechables por el organismo. Una alimentación adecuada es el primer paso para una vida saludable.
Mujeres y enfermedad cardiovascular.
Los estrógenos no protegen a la mujer de la enfermedad cardiovascular, según la Sociedad Española de Cardiología, sino que podrían aumentar la posibilidad de sufrir esa patología. En algunos países la enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte entre las mujeres.
Nadie se salva después de los 40.
La presbicia afecta al 100% de la población a partir de los 40 años. La presbicia o visión cansada consiste en un mal enfoque de los objetos o textos desde cerca. Es necesario alejarse de lo que estamos leyendo o de la tarea que realizamos y se necesita cada vez más luz para leer.
El alcohol contra la artritis.
Tomar el equivalente a cinco copas de vino a la semana puede reducir el riesgo de artritis reumatoide hasta un 50 por ciento, según dos estudios escandinavos cuyos resultados se publican en la revista "Annals of Rheumatic Diseases".