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PABLO MELGAR

El sindicato de funcionarios de la Administración Central dio por fracasadas las negociaciones salariales con el gobierno, y a partir del lunes se dispone a adoptar medidas de "gran impacto", entre ellas la ocupación de alguna repartición pública.

La Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), entiende que lo "poco" que avanzaron con el presidente José Mujica en la reunión del jueves no fue respetado ayer viernes por los negociadores del gobierno.

Para el lunes 30 -un día antes de que el Poder Ejecutivo envíe su proyecto de presupuesto quinquenal al Parlamento-, COFE convocó a una asamblea y a su secretariado, a fin de definir una batería de medidas de "gran impacto", dijo a El País el secretario general del sindicato, Joselo López.

No descartan ninguna medida, entre ellas ocupar oficinas de la Administración Central, un nuevo paro en el Estado o movilizaciones masivas. Estiman que "fracasó" la mediación del presidente Mujica entre COFE y los representantes del Poder Ejecutivo en la negociación colectiva.

Fuentes sindicales consignaron que en la mañana de ayer viernes la delegación del gobierno no propuso lo que había planteado en la noche del jueves el presidente Mujica. Es decir, mejorar la oferta de $ 14.427 por 40 horas semanales de trabajo. Los funcionarios del Estadio quieren ese piso salarial pero por 30 horas semanales.

"No se concretó nada de los pequeños avances que tuvimos en la reunión del jueves con Mujica", aseguró López, al terminar la reunión con la delegación del gobierno.

Según los sindicalistas, la decisión de COFE de solicitar una entrevista al primer mandatario y que éste la aceptara cayó mal en los negociadores del gobierno. "En cierto momento de la conversación los delegados del Poder Ejecutivo se ofuscaron porque apelamos al presidente de la República para destrabar las conversaciones. Dijeron que era como desvirtuar el ámbito", dijo López.

Según los sindicalistas, en la reunión del jueves el presidente planteó la posibilidad de generar partidas fijas para acercarse a los reclamos salariales de los sindicatos. En la entrevista, el primer mandatario solicitó a COFE que la propuesta no se diera a conocer.

Escuchar. "¿Cómo va a mediar con sus propios representantes? Habrán entendido mal", dijo a El País el prosecretario de Presidencia, Diego Cánepa, que participó de la reunión del jueves entre Mujica y COFE.

"El compromiso fue de escuchar con los negociadores los planteos que tenían ellos y ver cómo se podía llegar a producir avances en la negociación, respetando los canales correspondientes", explicó Cánepa.

El funcionario relativizó los compromisos asumidos por el presidente frente a los sindicalistas del Estado. "El presidente fue muy claro en que los ámbitos de negociación había que respetarlos. Les dijo explícitamente que de ninguna manera iba a pasar por encima de los negociadores. El gobierno trabaja en equipo y las negociaciones se están monitoreando continuamente", señaló.

Cánepa subrayó que el presidente no realizó ninguna llamada a OPP, Servicio Civil o el Ministerio de Economía y Finanzas. Además, agregó Cánepa, es él mismo uno de los articuladores entre esos organismos y Presidencia. Por otro lado, agregó que no es correcto decir que fracasó el diálogo ya que aún se está negociando.

A partir del martes 31, cuando venza el plazo para presentar el proyecto de presupuesto, los públicos instalarán una carpa frente al Palacio Legislativo. Además, está resuelto que todos los sindicatos del Estado se concentren frente al Palacio Legislativo ese día.

La delegación del Poder Ejecutivo está compuesta por Andrés Masoller y Martín Vallcorba del Ministerio de Economía, Homero Rodríguez y Ana Santiesteban por la Oficina de Planeamiento Presupuesto, y por la Oficina del Servicio Civil, Daniela Cabral y Laura Bayac.

Para el gobierno son becarios y pasantes, para los sindicalistas son "contratos basura". Lo cierto es que hay unos 16.000 funcionarios en todo el Estado cuyo vínculo contractual es precario y con fecha de vencimiento.

Ayer por la mañana un grupo de ellos se movilizó desde el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP) hasta la sede de la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) donde COFE se reunió con los representantes del gobierno.

Según los sindicalistas, el presidente Mujica confundió datos sobre los becarios y pasantes en la reunión del jueves. El primer mandatario estimó que el 10% de la plantilla de funcionarios estaba en esa condición.

Para los participantes de la reunión la confusión de Mujica es producto de la falta de información sobre la situación de los funcionarios que hay en el Estado.

De inmediato los estatales y municipales le aclararon que la cifra era muy menor y que los contratos que vencen antes del 31 de marzo de 2011 son 200.

De esa forma comenzó a producirse una distensión en el tratamiento del asunto y culminó con el anuncio de que habrá una ley específica para tratar la contratación de personal en el Estado.

Fue el único punto en el que los sindicalistas vieron un avance efectivo en la conversación con Mujica, según dijeron varios de los participantes del encuentro.

Los funcionarios de la salud privada aprobaron ayer un plan de movilizaciones que incluirá un paro de actividades por 24 horas el próximo viernes 10 de septiembre. Antes de eso harán una recorrida por todo el país, preparando ese paro general nacional, señaló a El País el secretario general de la Federación Uruguaya de la Salud (FUS). Jorge Bermúdez.

Además, el jueves 9 en Montevideo, se activará un paro parcial que irá desde las 8 hasta las 14 horas y que terminará con una concentración en la sede del Ministerio de Salud Pública (MSP).

Bermúdez explicó que las medidas de lucha obedecen al estancamiento de la negociación colectiva en el Consejo de Salarios, y en reproche a la versión que los empresarios tienen de la reforma de la salud.

El dirigente gremial señaló además que tienen previsto solicitar un informe a la Junta Nacional de Salud (Junasa) sobre cuál es la situación económica de cada una de las instituciones mutuales.

El dirigente gremial sostuvo que los planteos patronales son "hipócritas", pues dicen "que están en crisis y en la salud sigue habiendo salarios de hasta $ 500.000 por mes", cuestionó.

Según los funcionarios, las mutualistas han esgrimido tener "números rojos" durante las negociaciones y por eso quieren trasladar cualquier ajuste salarial a un aumento de la cuota mutual.

Los médicos también han mostrado discrepancias al momento de negociar un nuevo acuerdo salarial con el ámbito privado. Por ese motivo, iniciaron una serie de medidas que afectarán el cobro de las metas asistenciales.

Los funcionarios de la Dirección Nacional de Aduanas resolvieron ayer entrar en paro luego que el director general del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Pedro Apezteguía, se retirara abruptamente de la mesa de negociación.

La medida se prolongará hasta el mediodía del lunes cuando los funcionarios aduaneros se reunirán en asamblea.

El sindicalista Johnson Toledo consignó que se habilitará el paso de las cargas de exportación, los productos perecederos, medicamentos y elementos explosivos o peligrosos.

Fuentes del sindicato dijeron a El País que en un momento del diálogo, "Apezteguía se retiró porque se enojó". Si bien el director Nacional de Aduanas, Enrique Canon, continuó en la reunión, el sindicato entendió que se terminaba la negociación al retirarse el director general del MEF.

Las mismas fuentes señalaron que el tema que enojó a Apezteguía fue la solicitud de equiparación de grados dentro del MEF, un reclamo que vienen realizando desde 2008.

Según el sindicato, el problema radica en que la Aduanas tiene un posicionamiento inferior al resto del MEF en el organigrama funcional. Por ello cuando se producen traslados de oficinas del MEF a Aduanas, los funcionarios que son de bajo rango alcanzan los lugares más altos de la carrera funcional de la repartición, pasando por encima de los que ya están.

Los funcionarios sostienen que los ampara el artículo 178 de la última rendición de cuentas. Antes que culminara la reunión se habían alcanzado algunos acuerdos entres las partes. Ahora la asamblea resolverá si sigue o no con las medidas.

"Esperamos que Apezteguía vuelva con un ánimo y una actitud negociadora más amplia", indicó Toledo.

Contaduría. Los funcionarios de la Contaduría General de la Nación (CGN) también están de paros sorpresivos en el marco de un conflicto que mantienen con la conducción del organismo.

Claudia Rivero, presidenta del sindicato de la CGN, indicó que las movilizaciones son producto de que la directora del organismo, Laura Remersaro, propuso vincular el 10% de los salarios actuales de los funcionarios al cumplimiento de metas y compromisos funcionales.

El sindicato resolvió no realizar horas extras ni aceptar trabajar fuera de la semana hábil, como sucedía hasta el momento, según explicó Rivero.