Uno de los problemas del Derecho de Tránsito es lograr que el espacio público vial, único y limitado, cuyo uso libre es atribuido a la totalidad de los usuarios por igual y con idéntico derecho a emplearlo para desplazarse, sea utilizado simultáneamente de un modo pacífico y no conflictivo. Los peatones y los conductores deben compartir los derechos y obligaciones que se establecen. Se deben respetar.
Pero la mayoría de los accidentes con heridos se registran en las esquinas.¿Cuál es la causalidad de estos accidentes?
La mayor parte indica que hay un marcado desconocimiento de la reglamentación en cuanto a las preferencias, y la desestimación de la observación de las señales que reglamentan o regulan la intersección. Falta de atención, alcohol y fatiga también inciden.
El lugar más peligroso del Uruguay es cualquier esquina. Conflictos de vehículos con vehículos, éstos con peatones, etc.
El conductor debe entender que las esquinas se suceden vertiginosamente hacia uno y en contados segundos debemos enfrentar un cruce con el auto realmente dominado, desacelerado, aunque vengamos por una vía de sentido preferencial, exceptuando por supuesto en algunos casos las avenidas más anchas.
Pero cuando un conductor llega a la intersección debe conocer el reglamento en cuanto a las preferencias, como ser frente al cartel de "pare" o "ceda el paso". Y tenemos que ceder la preferencia a su tránsito. Ver art. D.622 de la OGTM.
Pero cuando no existen señales indicadoras, la preferencia rige para el que aparece por la derecha. Y está bien establecido en la reglamentación, sin excepciones. Ver Art. D.624 de la OGTM.
Creemos que el conductor debe tener una postura ciudadana y una actitud de defensa tal que haga que, aunque pueda utilizar su prioridad de paso, evalúe siempre la seguridad de la maniobra. De todos modos, una conducción segura se hace respetando las leyes de tránsito a pesar de los errores que cometan los demás. ¿Qué cuesta sacar el pie del acelerador unos metros antes del cruce y llevarlo al freno? ¿Tiempo? Nada. Quizás los de atrás se incomodarán, pero yo le pregunto: ¿Usted arriesga la vida y su capital por el que viene detrás?. No lo creo.