Una de ellas ya había sido objeto de robos en ocho ocasiones.
En un lapso de tres días, desde la noche del viernes 19 al domingo 21 de agosto, cinco escuelas fueron robadas en distintas zonas de Montevideo.
Dos de las escuelas están ubicadas en Piedras Blancas: la 151 y la 263; otra en Manga (335), otra en Maroñas (330) y la última en Pueblo Abayubá (224), en Colón Norte.
De acuerdo al consejero de Primaria, Héctor Florit, "lo que se llevaron en cualquiera de los casos fueron cosas menores".
En todos los establecimientos los ladrones se llevaron elementos de escaso valor como utensilios de cocina, alimentos y garrafas, ya que "generalmente son las únicas cosas que se pueden robar", explicó el consejero.
Pero más importante que las cosas que robaron, Florit explicó que fueron las roturas que sufrieron las escuelas. "Hubo daños importantes en aberturas como puertas y ventanas. También doblaron rejas en algunos casos y rompieron vidrios, que es peligroso porque son materiales cortantes", dijo.
Los daños causados hicieron que se tuvieran que reponer varias rejas y vidrios, a la vez que fue necesario contratar servicios de vigilancia privada. Asimismo se repararon los servicios de alarmas que habían sido rotos por los delincuentes.
Estas cinco escuelas atienden aproximadamente a 2.000 niños, dijo Florit, quien llamó la atención sobre los costos que estos robos implican para toda la educación."
"Lo que se invierte en seguridad es lo que no se gasta en educación: alarmas, servicios 222, guardias privados, cercos perimetrales, todo ese costo no se destina a libros, a textos, a profesores.... Son millones de dólares lo que la ANEP gasta anualmente en seguridad", se lamentó.
Florit resalta lo importante que es "tener una actitud de custodia por parte de la comunidad y de los barrios para preservar lo que son los bienes públicos".
Reiteración.
En el caso de la escuela 263, ubicada en Aparicio Saravia y Mendoza, ya ha habido reiterados robos, lo que llevó a que los padres de los alumnos se manifestaran públicamente por la situación. Florit sostuvo que es "entendible la indignación de los padres".
"Ya es el noveno robo que sufre esa escuela, pese a que se ha hecho una gran inversión: se ha puesto seguridad privada, se enterraron los cables de cobre de la entrada eléctrica, se repusieron rejas en varias oportunidades", indicó el consejero.
Según explica, son situaciones que están generando "una enorme preocupación y por esa razón es que entendemos a los padres en su reclamo".
FLORIT: "EDUCACIÓN TERMINA GASTANDO MILLONES DE DÓLARES AL AÑO EN SEGURIDAD”