EDUARDO DELGADO
Ricardo Moll y su padre, el ex contralmirante de la Armada, Eladio Moll, fueron condenados por estafa y encubrimiento. Según la sentencia, de la actuación de Julio Luis Sanguinetti y Ricardo Scaglia "no surge una actitud fraudulenta".
El caso judicial conocido como "Cangrejo rojo" fue de los más sonados durante la segunda presidencia de Julio María Sanguinetti y después de la misma.
Incluso su hijo, el ex diputado Julio Luis Sanguinetti, fue involucrado en el asunto, cuando se conoció el contenido de la grabación de una supuesta conversación telefónica entre el legislador y Ricardo Moll, que grabó éste último y en la que presuntamente el primero pedía una coima de un millón de dólares, cuestión que fue desmentida por el involucrado.
Tanto Ricardo como Eladio Moll fueron procesados con prisión por el delito de estafa en diciembre de 1999, por la entonces jueza penal de 1° Turno, María del Rosario Berro.
Recientemente, el juez Juan Carlos Fernández Lecchini, ahora a cargo de la sede penal de 1° Turno, condenó a Ricardo Moll a tres años de prisión por el delito de estafa, y a Eladio Moll a dos años de prisión por el delito de encubrimiento.
Los dos recuperaron su libertad años atrás y no retornarán a prisión. Ambos apelaron el fallo, por lo que los ministros de un tribunal de apelaciones analizan si lo mantienen, lo revocan o modifican.
En la extensísima resolución de Fernández Lecchini, a la que accedió El País, en reiteradas ocasiones se refiere a los permisos de pesca que debía tramitar Moll hijo para barcos propiedad de empresarios estadounidenses a través de la empresa Naifen, y de cómo considera que se apropió ilegalmente de las acciones y la explotación del buque Sofía Star.
ACTITUD. Respecto a Julio Luis Sanguinetti y el ex presidente de UTE, Ricardo Scaglia, que actuaron como abogados del empresario estadounidense Timothy Kennedy, "no surge de autos una actitud fraudulenta de los profesionales interviniente", sostiene el fallo.
El juez incluso coincide con declaraciones del ex diputado: "Queda claro para el Dr. Sanguinetti, igual que para el despacho, que los americanos no eran meros arrendadores y prestamistas, ajenos a Naifen y sus ganancias". "Es ilógico sostener que Kennedy compraría un barco a elevado precio para luego entregarlo a Ricardo Moll a un pobre arrendamiento", afirma Fernández Lecchini.
El juez dice que Ricardo Moll, "por comprensibles razones", trata de desvincular a su padre Eladio. Sobre el militar, el magistrado dice que en sus declaraciones "verbaliza una sensibilidad ética que no se reflejó en los hechos", ya que siendo contralmirante "en una etapa gestionó servicios" de la Armada para la empresa que administraba su hijo "y luego prohibió este tipo de dación".
Incluso Fernández Lecchini afirma que "es muy dudoso" que Eladio Moll "no haya sacado tajada" y que ayudó a la apropiación del Sofía Star.
Supuesto diálogo telefónico
-R. Moll: Y bueno, ahora decime ¿qué querés vos?
-J.L. Sanguinetti: Yo quiero uno.
-R.M.: ¿En plata?
-J.L.S.: En plata. En plata.
-R.M.: En plata. En plata. ¿Es por tu tarea?
-J.L.S.: Sí... claro.
Esta es parte de la supuesta conversación entre Moll y Sanguinetti hijo, difundida por la desaparecida revista Posdata. El entonces diputado colorado negó en la Justicia ser parte de ese diálogo con Ricardo Moll.